Egibar descarta volver a intentar la fusión de las cajas tras las elecciones
El presidente del Gipuzku Buru Batzar del PNV, Joseba Egibar, afirmó ayer que el ciclo de la fusión de las cajas vascas se ha acabado y descartó un nuevo intento tras las elecciones autonómicas. Egibar afirmó que BBK, Kutxa y Vital ahora deberán seguir su vida en solitario e insistió en responsabilizar del fracaso del proyecto de fusión que se votó el viernes al PSE, PP, ELA, LAB y la izquierda abertzale.GARA |
El presidente del GBB, Joseba Egibar, dio ayer por cerrado el ciclo del proyecto de fusión de las cajas que «había creado muchas esperanzas y que era incontestable socialmente», y lo achacó a estrategias partidistas.
Tras mostrarse decepcionado, recordó que, a pesar de todo, «la vida sigue y, desde luego, tanto la Kutxa, como la BBK, como la Vital, deberán seguir su vida como cajas en solitario». Preguntado sobre si este proyecto de fusión podría retomarse tras las próximas elecciones autonómicas, puerta que ha dejado abierta el PSE, Egibar afirmó que «podrán decir lo que quieran, pero esta operación se ha acabado». Apuntó que, tras los comicios al Parlamento de Gasteiz, «podrá cambiar el interés político del PSE», pero no las asambleas de Kutxa y BBK.
Responsables políticos
El presidente del GBB insistió en afirmar que los responsables políticos de que la operación de fusión de BBK y Kutxa no haya salido adelante son PSE, PP, ELA, LAB y el colectivo Banatuz de la izquierda abertzale.
Tras no haber logrado el apoyo suficiente para su proyecto en la asamblea de Kutxa celebrada el viernes, donde 63 compromisarios votaron a favor del proyecto, 33 en contra y 4 se abstuvieron, Egibar afirmó que se trata de los que «se situaron en el bloque del no, que, en definitiva persiguen neutralizar e impedir» este proyecto.
El dirigente jeltzale lamentó que se esté vendiendo este resultado «como un gran triunfo» o como «un fracaso del PNV«, cuando quienes han apostado por esta operación «PNV, otros partidos y sindicatos sumaron más votos que quienes se han instalado en la estrategia del no». Acusó al PSE de «intentar retrasar en el tiempo e impedir la creación de instituciones, en este caso financieras, potentes que estructuren este país, a diferencia de lo que está ocurriendo en otras comunidades autónomas, como Andalucía, Cataluña, Galicia o Valencia, donde impulsado procesos de fusión», y añadió que en esta estrategia «encuentra compañeros de viaje»,
«Cuanto más débil sea el sistema vasco desde la perspectiva de Estado del PSOE, mejor, eso es lo que piensan y la política que practican», criticó.
Además, censuró que el PSE «suma sus votos a otras expresiones sindicales o sociales, que, a la espera, de no se sabe si es la gran caja de cuatro territorios o de cinco, mantienen la perspectiva de que endosan una derrota al PNV, lo que tiene más que ver con el complejo de querer matar al padre».
De esta forma, indicó que el único «leitmotiv» de quienes han rechazado la fusión es «castigar al PNV». Recordó que el PSE mantenía «desde hace dos años un acuerdo con el PNV para impulsar la fusión `a tres' que ha incumplido, por lo que opinó que no son gente de fiar». «Ahora ha impedido la fusión 'a dos'», y frente a ello, le instó a estar a la altura de las responsabilidades propias», sin intentar de transferirlas constantemente a los demás».
Egibar también repartió sus críticas a la izquierda abertzale, al ser preguntado sobre las afirmaciones de Arnaldo Otegi en GARA, sobre que el PNV debe quedar fuera de un posible proyecto soberanista. Egibar señaló que la izquierda abertzale puede «constituir ese polo con los socios que ha tenido en la votación» de la asamblea de Kutxa. En este contexto, opinó que es «triste que la izquierda abertzale mantenga la estrategia según la cual, parece que todos los problemas se van a solucionar cuando el PNV salga de las instituciones. Pues que esperen», ironizó.
Egibar insistió en que BBK, Kutxa y Vital deberán seguir su funcionamiento en solitario porque «esta operación ha acabado» y tras las elecciones autonómicas, «podrá cambiar el interés político del PSE» pero no las asambleas de Kutxa y BBK.
Egibar rechazó la posibilidad de repetir la votación en la asamblea de Kutxa y que no sea secreta, como había formulado EA, porque «la gente que estaba allí se supone es responsable y, por tanto, que la votación sea pública o no no tiene valor añadido».
Pese a que Egibar diera por terminados los intentos de fusión de las cajas, ayer mismo su compañero de partido y diputado general de Araba, Xabier Agirre, insistió en defender la vigencia del proyecto porque posibilitaría la creación de una «entidad más sólida, diversificada y solvente en un entorno económico y financiero difícil». Agirre insistió así en la misma idea que habían expuesto el presidente del EBB, Iñigo Urkullu, quien indicó que «la fusión llegará ya que el proyecto es un partido a doble vuelta», o el diputado general de Gipuzkoa, Markel Olano, que mostró su confianza en que la unión de las cajas «en breve saldrá adelante» y afirmó que «hará todo lo que esté en su mano para llevar adelante» esta operación. El propio presidente de Kutxa, Xabier Iturbe, ha manifestado su voluntad de seguir adelante.
Desde el PSE, su secretario general en Bizkaia, José Antonio Pastor, afirmó que «habrá tiempo de recuperar la lógica y la cordura» precisas para sacar adelante la fusión. Pastor interpretó el fracaso de la operación como un «castigo a la prepotencia del PNV», que los dirigentes jeltzales «no han digerido y les ha hecho perder los papeles, sin hacer una mínima autocrítica».