Silencio absoluto. Así respondió el Athletic al escándalo originado por la grabación hecha pública en la noche del miércoles.

A la espera, quizá, de que los protagonistas de la conversación comparezcan en público, o de que los organismos competentes decidan tomar cartas en el asunto, el club rojiblanco decidió dar la callada por respuesta. Ni hubo comunicado oficial, ni habló Fernando García Macua, que visitó al equipo en Lezama, ni lo hizo Joseba Etxeberria, capitán del equipo y presuntamente citado por Iñaki Descarga en la conversación, pese al requerimiento de la prensa. Tampoco Javi Martínez, al que le tocó comparecer en sala de prensa tras el entrenamiento. «No tenemos nada que decir al respecto», fue la respuesta del navarro, idéntica a la que ofrecería Fernando Llorente, horas después, en el chat en el que participó a través de la página web rojiblanca.

El que sí habló, aunque de forma escueta y a través de una nota emitida por sus abogados, fue Julio Romero. El presidente del Levante, protagonista de la polémica conversación junto al excapitán azulgrana Iñaki Descarga, negó el acuerdo con el Athletic y anunció su decisión de emprender acciones legales. «Ante las informaciones aparecidas en las últimas horas en distintos medios de comunicación relativas a mi persona -decía el comunicado de Romero-, quiero manifestar lo siguiente: no ha existido acuerdo alguno con el Athletic Club de Bilbao y no ha existido conversación alguna con el Presidente de la Real Federación Española de Fútbol, don Angel María Villar. Como consecuencia de ello, informo que he puesto en manos de mis abogados este asunto, al objeto de que se ejerzan las oportunas acciones legales».

RFEF y Celta, a la espera

Desde la tercera pata de este caso, la Federación Española, se mostró, por otra parte, el deseo de que «se aclare todo, en favor de la limpieza del deporte».

Fuentes de este organismo aseguraron no haber recibido ninguna denuncia sobre un posible amaño del encuentro disputado por Athletic y Levante en la última jornada de la temporad 06/07, por lo que la Federación Española quedaría ahora a la espera de la decisión que pueda adoptar el Comité de Competición el próximo martes. Un Comité que esta semana ya ha trasladado al Ministerio Fiscal los antecedentes sobre el Málaga-Tenerife de la temporada pasada, después de que se hiciera pública una conversación entre Jesuli e Iñaki Badiola.

Y este caso podría seguir el mismo camino, según se desprende de la nota emitida ayer por el Celta, el equipo perjudicado en caso de que el tongo hubiera existido. En la misma, el club gallego asegura que ha decidido dejar el asunto «en manos de la justicia», después de que los «organismos deportivos competentes han comunicado al club que estas actuaciones se remitirán al Ministerio Fiscal, a fin de que depure las posibles responsabilidades en las que las partes hayan podido incurrir». «Las pertinentes actuaciones del Celta quedarán supeditadas al resultado de las investigaciones que realice el mencionado Ministerio Fiscal y al resultado de las posibles resoluciones judiciales que se deriven de las mismas», concluye la nota del club gallego.

Negativa o silencio

Entre los protagonistas azulgranas de aquel partido, las reacciones fueron del silencio a la negativa. Entre los primeros, el entrenador, ahora en el Castellón, Abel Resino. «No he hecho ninguna declaración. Preguntádle a quien la haya hecho», respondió el técnico, mientras Gustavo Reggi, a sus órdenes entonces y ahora, aseguró que «me acabo de enterar de lo que ha salido y no sé nada».

Más contundente se mostró Luis Manuel Rubiales, ahora en el Alicante, que aseguró tener la conciencia «muy tranquila». «Si alguien tiene que explicar cualquier cosa serán las personas que aparecen en la grabación. Yo no voy a hablar de si creo, de si dejo de creer o de lo que digan otras personas», aseguró el jugador, que dejó claro que si existió el tongo, «yo lo desconocía por completo». «Lo he podido hacer mejor o peor -añadió-, pero estoy supertranquilo y creo en la inocencia de mis compañeros mientras no se demuestre lo contrario».

Su excompañero Félix Ettien aseguró que fue «un partido al que salimos, como siempre, a jugar y a intentar ganar. Yo no cobré ni sé nada de una caja fuerte con dinero», subrayó. «Durante el partido estuve hablando con algunos compañeros que me decían que no corriera tanto, pero son un tipo de conversaciones normales dentro de un partido. Eso no quiere decir que un partido esté amañado. Sería una falta de respeto hacia nosotros si los rivales nos hubieran dicho algo», concluyó.