El movimiento islamista Hamas anunció ayer, tras consultar con el resto de formaciones palestinas, que no renovará la tregua en Gaza el próximo día 19 si Israel mantiene el bloqueo a este territorio palestino y las operaciones militares contra la población.

«Hamas y los grupos palestinos llevaron a cabo consultas internas para tomar una decisión sobre la tregua con la ocupación sionista», explicó ayer Jalil al-Haya, dirigente de la formación islamista en Gaza.

En los encuentros acordaron que el cese de hostilidades «no será prorrogado bajo las agresiones y el cerco a nuestro pueblo en Gaza y Cisjordania».

En la ronda de consultas, la Yihad Islámica y el izquierdista FPLP coincidieron en señalar a Israel como el único beneficiado por el alto el fuego.

«No consideramos la tregua con la ocupación una decisión que haya que repetir», señaló el FPLP en un comunicado.

Yamil Yusef, líder de la Yihad Islámica, acusó a Israel de querer «el fin de la resistencia a cambio de unas cuantas remesas de alimentos», en alusión al ligerísimo alivio del bloqueo a Gaza que permitieron las autoridades sionistas.

Israel viola a diario la tregua desde hace un mes, cuando el Ejército sionista mató a seis milicianos al internarse en Gaza con el argumento de que buscaban destruir un túnel subterráneo excavado para capturar un soldado israelí. Las milicias palestinas también han respondido a los ataques sionistas durante este mes.

Desde entonces, 19 palestinos han muerto en operaciones militares israelíes. Ningún israelí ha fallecido como consencuencia de los lanzamiento de cohetes artesanales contra posiciones sionistas en el Neguev.

Desalojo en Hebrón

Por otra parte, la Policía israelí evacuó ayer por la fuerza a un grupo de 250 colonos ultraortodoxos que se habían atrincherado en una casa ocupada ilegalmente en la ciudad cisjordana de Hebrón.

De este modo, el Gobierno israelí respondía al pulso de los ultraortodoxos, que se negaban a abandonar este asentamiento ilegal, uno de los muchos que ocupan en Cisjordania.

En respuesta al desalojo, grupos de colonos ultraortodoxos atacaron a vecinos de Hebrón, destrozando olivares, lanzando piedras, provocando tres heridos de bala e incendiando al menos dos casas, según señalaron testigos presenciales.

Asimismo, los colonos ultraortodoxos dieron fuego a una quincena de coches palestinos.