El Ejército cingalés llevó a cabo el sábado bombardeos aéreos intensivos contra el cuartel general político de los rebeldes del LTTE en el distrito de Kilinochchi con el objetivo de preparar un asalto inminente de sus tropas terrestres, según anunció ayer el Ministerio cingalés de Defensa.

Las fuerzas aéreas cingalesas efectuaron nueve salidas contra las posiciones de los Tigres para la Liberación de Tamil Eelam (LTTE), «que sufrieron grandes pérdidas», añadió Colombo, que precisó que un comandante tamil pereció en los bombardeos.

El LTTE, que ha afirmado que jamás abandonará Kilinochchi, no respondió a estas informaciones.

La semana pasada el Ejército cingalés afirmó que estuvo a punto de tomar Kilinochchi, pero que se lo impidieron la encarnizada resistencia tamil y las lluvias del monzón.

El viernes, el Ministerio de Defensa anunció que las fuerzas de seguridad cingalesas habían tomado el control de Terumarikandi, a unos ocho kilómetros al sur de Kilinochchi. Ambas partes afirmaron haber provocado grandes pérdidas al enemigo.

El Gobierno de Sri Lanka rompió en enero la tregua con los tamiles.