Las encuestas están haciendo mella en la moral de la nomenclatura jelkide. Iñigo Urkullu, presa de los nervios, ha revelado el pensamiento profundo de su partido en relación al apartheid contra la izquierda independentista. Traicionado por el subconsciente, lamenta que el PSOE pueda llegar a permitir la presencia electoral de la izquierda abertzale si de ello se beneficia Patxi López. Las elecciones y el miedo a perderlas les desnudan.