CRíTICA cine
«Protegidos por su enemigo»
Koldo LANDALUZE
En compañía de hombres” y “Amigos y vecinos” catalogaron a Neil LaBute como un cronista urbano que indagaba, con cierta originalidad, en los desarreglos emocionales de una sociedad marcada por la incomunicación y el desencanto. En sus posteriores intentos cinematográficos, el autor de “Posesión” ha pretendido un equilibrio entre su faceta autoril y la comercialidad lo cual se ha saldado con muy desiguales resultados. Las malas críticas y resultados cosechados por “Wicker man” han propiciado este nuevo filme, en el cual confluyen algunas constantes de este autor acostumbrado a moverse con mayor soltura en las distancias cortas.
“Protegidos por su enemigo” plantea algunos detalles interesantes en su arranque y planteamiento. Lamentablemente, todo queda en un superficial envoltorio dramático que apenas oculta las carencias de una trama que, escena a escena, nos descubre que estamos ante un thriller mimético que presta mayor interés a las poses y formas que al ideario y la ética que inspira los actos de los personajes. En la oportuna escenografía de un Los Ángeles reconvertido en polvorín humano, el filme recrea los miedos e inquietud que generará en una pareja la presencia física de su vecino; un agente de Policía que prolonga su faceta «protectora» durante las veinticuatro horas. A Samuel L. Jackson le corresponde lucir la placa de este agente agobiante que determinará cada movimiento de una pareja que, en un intento por enriquecer la trama, muestra abiertamente algunas disfunciones domésticas.
La tensión decrece a cada instante por la incapacidad de un guión que, en su recta final, se derrumba como un castillo de naipes debido a un ritmo no acorde con lo que se pretende mostrar en este conflicto vecinal tremebundo y, a ratos, hasta disparatado. La poderosa presencia de Samuel L. Jackson y la buena química entre Patrick Wilson y Kerry Washington, son las bazas principales que maneja este thriller que certifica la acomodada línea creativa de Neil sLaBute.
