Jorge Perez Jáuregui
Víctimas sin apellidos
Me produce rabia e indignación que en el homenaje que el Ayuntamiento de nuestro pueblo, Eibar, organizó para el día 21 se reconociera a las víctimas de ETA, a las víctimas de la Triple A, del Batallón Vasco-español... y el único al que se dejara fuera sea mi hermano, Roberto Pérez Jáuregui, asesinado en una manifestación popular y pacífica en protesta por el Proceso de Burgos en diciembre de 1970. El pasado día 8 se cumplieron 38 años de su muerte, y seguimos sin la posibilidad de pedir justicia y de aclarar los hechos.
¿Y os atrevéis a decir que ni Roberto ni nosotros, su familia, somos víctimas del terrorismo? ¿Os atrevéis a hablar de memoria histórica cuando está claro que habéis borrado una parte importante de la historia de este pueblo? Somos víctimas del peor de los terrorismos, el de estado.
Por quien más lo siento es por mi padre, Casimiro, y casi me alegro de que mi madre Alicia no esté entre nosotros y no tenga que ver la desfachatez de este Ayuntamiento.
Por último, «agradecer» al Ayuntamiento de Eibar la nula información y el no haberse puesto en contacto con nosotros.