Jon Larrinoa
Por fin...
Ya no se trata de cómo se llama, la cuestión es que los futbolistas se han dado cuenta de que con un partido folclórico en Navidad no se ganaba nada. Alegrar el día a los niños y niñas está bien, pero no adelantábamos nada para el fin de conseguir una selección oficial y poder participar en competiciones importantes como la Eurocopa, Mundiales, etc.
Por lo menos los futbolistas han dicho que el fondo es conseguir ese objetivo. No vale decir que no somos un estado, ya que hay muchos ejemplos que tapan esos argumentos. Queremos ver a nuestra selección oficial jugando contra Inglaterra, Francia, Escocia o la misma España...
Sin ser futbolero, me gustaría tener mi selección. Me da igual si ganamos o perdemos. Y dejémonos de tonterías como el nombre. Somos una nación y se acabó.