La pareja más joven de las seis que empezaron el Torneo Tejados Aoiz, formada por los navarros Javier Urriza y Julen San Miguel, logró el primer billete para jugar la gran final del 10 de enero, al vencer en la vuelta de su semifinal a Altuna II-Eizagirre por 37-40 (también les ganaron en la ida, 27-40). Por contra, Zeberio II-Agirrezabala forzaron el tercer partido de desempate tras vencer por 28-40 en el Euskal a Ezkurra-Gaztelu.

Pese al triunfo, Urriza-San Miguel sufrieron de lo lindo en este partido de vuelta. Tras un arranque fulminante, en el que de nuevo mostraron el juego arrasador que les ha encumbrado en este campeonato (ventajas de 3-15 y 10-24 en ese inicio), los veteranos Altuna II y Eizagirre entraron por fin en el encuentro, endurecieron el peloteo y resquebrajaron la resis- tencia de San Miguel en la zaga, que dio muestras de inseguridad por primera vez en todo el torneo. Así, lejos de lograr un resultado de escándalo como cabía pensar en el 10-24, Urriza-San Miguel vieron menguar sus ventajas progresivamente (17-27, 22-28, 30-35), hasta llegar a un emocionantísimo 33-37... y saque para un especialista en la materia como Eizagirre.

Despedida de Eizagirre

En esos instantes, la constancia y el pundonor de Urriza fueron las bazas de los azules para responder a un Altuna II desatado a esas alturas y lograr, con mucho sufrimiento, el 37-40, tanto peloteado que se le escapó a Eizagirre a las tablas de la contracancha. Tras este amago de tremenda voltereta, Altuna II-Eizagirre se despiden del Campeonato Oficial de Parejas, el último gran torneo para el tetracampeón del parejas Jon Eizagirre -el zarauztarra colgará el remonte a finales de enero-.

Zeberio II-Agirrezabala forzaron ayer en el Euskal el desempate en su semifinal ante Ezkurra-Gaztelu, al vencerles por 28-40 y neutralizar así el 40-29 adverso de la ida -al tener mejor diferencia de tantos, tienen el derecho de elegir dónde se jugará dicho desempate, que tendrá lugar finalmente el próximo martes 6 de enero, en el propio recinto uhartearra-.

Al contrario de lo que sucedió en la ida, la pareja guipuzcoana se mostró perfectamente compenetrada, con un Agirrezabala muy superior a Gaztelu en la zaga y un Zeberio con más ritmo e insistencia en sus envíos, más activo que un Ezkurra que fue evitado por sistema por sus rivales, descartado en momentos claves. El choque comenzó con un toma y daca entre Ezkurra y Zeberio II hasta la igualada a 19 tantos, momento en el cual los guipuzcoanos pegaron un estirón definitivo para la suerte del partido (19-28).