Cuatro detenidos y varios heridos en el levantamiento de actas de Zornotza
El proceso de levantamiento de actas de expropiación para las obras del Tren de Alta Velocidad vivió ayer un nuevo capítulo convulso, esta vez en Zornotza. Cuatro personas arrestadas y varios jóvenes contusionados e identificados fue el resultado de la actuación de la Ertzaintza. La Policía autonómica se afanó en impedir la protesta, sin embargo el rechazo a esta infraestructura se hizo eco en la localidad vizcaina mediante una concentración y una kalejira.
GARA |
La primera jornada fijada para la firma de las actas de expropiación previa a la ocupación de los terrenos afectados por el Tren de Alta Velocidad en Zornotza se saldó con cuatro personas detenidas, jóvenes contusionados y varias identificaciones.
AHT Gelditu! Elkarlana reunió a decenas de zornotzarras desde primera hora de la mañana con el objeto de hacer escuchar su oposición a este infraestructura ante el Zornotza Aretoa, donde los propietarios de los terrenos afectados por este proyecto estaban convocados para firmar las actas de expropiación.
Sin embargo, para las ocho de la mañana varios furgones de la Ertzaintza se encontraban ya estacionados en los accesos al edificio, impidiendo el paso a la protesta, pero no silenciándola.
Alrededor de 70 ciudadanos realizaron una concentración en la plaza situada cerca del edificio municipal y mediante pancartas, carteles y gritos contrarios a esta infraestructura, se hicieron ver y escuchar durante cerca de una hora.
Una vez dada por finalizada la concentración, AHT Gelditu! Elkarlana optó por trasladar la protesta a las calles de la localidad vizcaina mediante una kalejira. La marcha, sin embargo, fue abortada por la Ertzaintza, con un balance de cuatro arrestados, varios contusionados y numerosas identificaciones.
Las cuatro personas detenidas, que fueron acusadas de un delito de «desórdenes públicos», recobraron su libertad al mediodía, y horas más tarde, ya por la tarde, comparecían ante los medios de comunicación arropados por AHT Gelditu! Elkarlana para denunciar la actitud del PNV. «¿Si tan orgullosos están de su proyecto, por qué no lo defienden informando en vez de mediante la fuerza y la represión?», preguntaron con indignación.
Aseguraron que el TAV es una «imposición» y, como ejemplo de ello, describieron lo acaecido por la mañana en ese mismo escenario, y apuntaron que lo ocurrido ayer en Zornotza no es un caso aislado.
Pese a todo, reiteraron su intención de seguir trabajando contra esta infraestructura y en defensa de las tierras de Zornotza y sus vecinos y vecinas. Asimismo, llamaron a participar en la marcha que el sábado tendrá lugar en Urbina.
Nuevos apoyos
Al igual que los asistentes a la rueda de prensa de Zornotza, la Asamblea contra el TAV mostró ayer su adhesión a esta manifestación que bajo el lema «Lurra berreskuratu! AHT Gelditu!» recorrerá Urbina. La marcha también ha cosechado el respaldo de la izquierda abertzale, que mediante una nota prensa llamó a los sectores trabajadores y populares del país a secundar la marcha.
En la nota, señala al TAV como el «máximo exponente de la necesidad del cambio político y social en Euskal Herria» y afirma que este país necesita la soberanía para poder decidir sobre su futuro en todos sus aspectos; «En definitiva, para poder construir una Euskal Herria radicalmente distinta al modelo TAV», concluyen en la nota.
El tren de Alta Velocidad que une París y Hendaia, el TGV, fue objeto de sabotaje a última hora de la tarde del martes, cuando el trayecto que transcurre al norte de la capital labortana fue obstruido con la colocación de placas de hormigón. La parte delantera del ferrocarril sufrió daños al chocar contra las placas, pero ninguna persona que viajaba padeció daños por motivo del accidente.
El ataque tuvo lugar en la localidad landesa de Ondres, y el servicio tuvo que ser suspendido alrededor de quince minutos mientras que los trabajadores de SNCF se afanaban en retirar las placas de cemento. Nada más apartar los obstáculos y comprobar que la vía se encontraba en buen estado, el ferrocarril continuó su viaje hasta Hendaia, hacia las 21.15.
El tren llegó a esta localidad con un cuarto de hora retraso y con la parte delantera «cascada», tal y como informaron ayer fuentes de SNCF.
La compañía de ferrocarriles aseguró, asimismo, que ya han presentado una queja por este incidente ante el juzgado de Dax, encargado de investigar el sabotaje. Según se afirmaba ayer «todo indica a que las placas de hormigón fueron colocadas a propósito».