Tras el escándalo arbitral en el Bernabéu
Osasuna decide romper relaciones formales con el estamento arbitral
El lamentable arbitraje de Pérez Burrull en el Santiago Bernabéu ha agotado la paciencia de la junta directiva rojilla. Su presidente, Pachi Izco, hizo público que Osasuna ya ha tomado la determinación de «romper oficial e institucionalmente relaciones con el estamento arbitral».
Natxo MATXIN | IRUÑEA
Es una decisión inédita hasta ahora en la entidad navarra. «Supondrá dificultades y alguna reacción que habrá que manejarla», pero ha sido la consecuencia «de colmarse el vaso de nuestra paciencia, porque algún día tenía que decirse `esto se ha acabado' y ahora es el momento», señaló Pachi Izco.
De hecho, los actuales rectores del club siempre habían defendido la filosofía de mantener una «actitud correcta» hacia los estamentos arbitrales, pese a que la temporada pasada el equipo sufrió actuaciones muy perjudiciales por parte de algunos trencillas.
La determinación anunciada ayer por el máximo dirigente rojillo no sólo es novedosa, sino que tiene el matiz de que supone, aunque Izco no terminara de explicitarlo, que el malestar se centra en todo el colectivo colegial y sus responsables, y no en un árbitro en concreto, al entenderse que la persecución es generalizada.
En principio, esta reacción va a traer consigo que el colegio de árbitros de Nafarroa no pueda disponer de pases para los encuentros que se jugarán en El Sadar, pero «se atenderán correctamente todas nuestras obligaciones federativas» hacia el árbitro que le toque en suerte, aclaró Izco.
Oposición y total rechazo
El presidente osasunista, que no encontró explicación «a tantos errores», tildó el arbitraje de Pérez Burrull de «inmoralidad» porque «estoy convencido de que vio las dos jugadas y, de hecho, una la pitó». Izco, que anticipó que se van a presentar pruebas videográficas «que entendemos van a conseguir anular las dos amarillas de Juanfran y que el jugador no sea sancionado», desveló que el trencilla cántabro se mostró «desafiante» cuando ambos se encararon a la finalización del partido.
También reveló que había recibido un buen número de llamadas solidarias de otros clubes y entidades futbolísticas, bien diferente a los responsables de la Federación, «con quienes quise hablar ayer [por el domingo], pero no me atendieron ni hoy [lunes] tampoco».
Por su parte, la Federación de Peñas rojillas mostró su «total apoyo» a la decisión del club y pidió la «unidad de todos los estamentos del osasunismo para que logremos el objetivo de la salvación».
En un mundo tan polarizado como el del fútbol es difícil encontrar unanimidad como ayer. Lo ocurrido en el Real Madrid-Osasuna fue tildado de «expolio» por ``El País'', ``La Vanguardia'' o ``El Mundo''. En este último se podían leer cosas así: «El Madrid entra en la historia como beneficiario de un atraco más espectacular que el del tren de Glasgow». En ``El Larguero'' de la Cadena Ser, el programa más oído de la radio deportiva estatal, se dedicó un «sanedrín» especial al tema, durante media hora. En Canal+, el ex jugador del Athletic Manolo Sarabia se declaraba «indignado» por la actitud arbitral, más aún tras ofrecerse las imágenes en las que Pérez Burrull reprochara a Juanfran que no sabía tirarse tras haber sufrido un penalti alevoso. La actitud del interior rojillo también merecía comentarios. Para ``El País'', «que no sufriera un ataque de nervios o un episodio de ansiedad le convierte en el héroe de la jornada, el gran aspirante a uno de esos premios de juego limpio». ``El Mundo'' afirmaba que «le robaron, le acuchillaron, se ligaron a su novia y acabaron metiéndole en la cárcel. Para no volver a un campo de fútbol».
Los jugadores cadetes del Club Deportivo Laudio, de unos 14 años, presenciaron en el Bernabéu el partido, por invitación de uno de sus patrocinadores, pero la experiencia tuvo final desgraciado. El autobús fue apedreado a la salida por un grupo de ultras que no pudieron «cazar» a los autocares de seguidores osasunistas que ya se habían marchado de allí, escoltados en este caso por la Policía. Un portavoz del club laudioarra confirmó el ataque, en el que se rompieron dos lunas del vehículo, y añadió que han decidido ponerse en contacto tanto con el Real Madrid como con responsables de seguridad para que den explicaciones y tomen medidas.