El grupo juntero de la izquierda abertzale de Araba reclamó ayer a la Diputación que inicie «acciones concretas que detengan el desastre de Zaballa» por el impacto medioambiental que, a su juicio, supondría la construcción de una cárcel en esta zona.

Los apoderados independentistas aseguraron que «los esfuerzos del diputado general Xabier Agirre y del Gobierno Vasco para aparecer ante los medios de comunicación como los opositores al proyecto de la cárcel de Zaballa están motivados por las próximas elecciones autonómicas, y no por una preocupación real por nuestro entorno y patrimonio ecológico».

«En los últimos tiempos nos estamos acostumbrando a ver posiciones que, lejos de detener la maquinaria que trabaja de forma irregular en la construcción de una cárcel que no necesitamos, airean intenciones que no se materializan», señalaron.

En opinión de la izquierda abertzale, «en marzo hará un año de la entrada de las primeras excavadoras al entorno del antiguo polvorín de Zaballa, y en todo este tiempo, no se han oído voces de alarma por parte del diputado general, un silencio que ha sido un colaborador necesario en el desastre».

«Ahora, Xabier Agirre se siente en la necesidad de lavar su cara y, dado que las elecciones son autonómicas, de extender el jabón hacía el gobierno autonómico, exigiendo desde Lakua a Madrid la realización del informe medioambiental que el Gobierno estatal se niega a hacer», lamentaron.

«No cabe más demora ni más actos de cara a la galería, la Diputación debe definir el tipo de relación que quiere con un gobierno, el español, que pasa por encima de toda norma foral sin ningún respeto», declararon.