Ante las elecciones del 1 de Marzo
Por el interés te quiero Andrés
Iñaki IRIONDO
De la lectura de las declaraciones de Iñigo Urkullu a María Antonia Iglesias y de los acontecimientos posteriores pueden extraerse algunas conclusiones interesantes. La primera: que el presidente del EBB tiene un importante problema en su relación con los medios de comunicación. Es inconcebible que un líder político se desnude ante una periodista como si lo hiciera ante su director espiritual o su sicoanalista. Los sacerdotes y los siquiatras tienen el deber de guardar secreto sobre las confesiones recibidas, pero los periodistas vivimos de contarlas. En un año de mandato, es la cuarta vez que Urkullu dice que no se le ha entendido o se le ha descontextualizado en cuestiones de gran trascendencia política.
La segunda enseñanza es que, por mucho que se empeñen en negarlo, el PNV sufre una profunda crisis interna, y las palabras de Iñigo Urkullu y también algunas otras declaraciones que se recogen en el libro de otros dirigentes o ex dirigentes jeltzales así lo atestiguan. En estas circunstancias, si para el presidente del partido la actuación del lehendakari es un continuo quebradero de cabeza y además siente que no está siendo honesto con él, lo lógico sería no presentarlo a la reelección. O si tan preso está el PNV de la popularidad de Ibarretxe, deberían reconsiderar el papel de cada cual. A su vez, si el lehendakari ve ahora publicado que al partido no le gusta lo que hace, debiera tomar alguna decisión sobre su continuidad.
Y de ahí deriva la tercera lección: nadie rompe la baraja, nadie dimite, a nadie cesan a pesar de andar a puñaladas internas, porque todos se necesitan para que la gran maquinaria que es el PNV siga en el poder. Urkullu dijo ayer, hablando de otras cosas, que «no es nuestro estilo el aplicar el dicho castizo de `por el interés te quiero Andrés'». Que cada cual juzgue por qué se mostraron ayer tanto amor Juanjo e Iñigo.