Lfinal se disputa en Tampa (Florida) entre los Pittsburgh Steelers y los Arizona Cardinals. Lo primero que hay que señalar es que el fútbol americano es al fútbol lo que un huevo a una castaña. No sé parecen más que en el nombre. Mucha gente piensa que es similar al rugby, pero no se dejen engañar por la forma del balón. Estamos hablando de deportes completamente diferentes, aunque tengan los tres un origen común.

En el Campeonato de la NFL, que arranca en setiembre, toman parte 32 equipos. De manera similar a la NBA, están divididos en dos conferencias. Cada una de ellas, a su vez, en cuatro divisiones de cuatro equipos. Por la dureza de este deporte, un equipo juega en la temporada regular sólo 16 partidos.

Finalizada la temporada regular se llega a las eliminatorias por el título de cada una de las conferencias: los play-offs. Los juegan seis equipos por conferencia: los campeones de cada división -cuatro equipos-, más los dos conjuntos de tengan un mejor balance de victorias-derrotas. A estos se les que se denomina wildcards. Todas las rondas son a partido único. En la primera, los dos mejores campeones de división quedan exentos, mientras que los otros dos se enfrentan a los wildcards. Los ganadores pasan a la segunda ronda, en la que se enfrentan a los dos que han quedado exentos de la primera ronda. Estas serían las semifinales de conferencia.

Los ganadores de estos partidos disputan la final. Y los ganadores de cada conferencia se juegan la Super Bowl, siempre el último domingo de enero. En total, el máximo de partidos oficiales que puede llegar a disputar un equipo asciende a veinte.

El terreno y otras cuestiones básicas

El fútbol americano se juega en un campo que mide 100 yardas de largo (unos 91,5 metros) por 53 yardas de ancho (unos 49 metros). Además, en cada extremo hay una de prolongación de otras diez yardas de largo llamada endzone (zona de anotación). Al final de cada endzone se encuentran unos palos similares a los del rugby. Las cien yardas del campo están marcadas con rayas. La línea que divide el terreno de juego en dos mitades queda marcada con el número 50, el resto de las yardas se numeran en orden decreciente hacia cada extremo hasta las endzones (40, 30, 20...). Cada equipo alinea once jugadores. La plantilla ronda el medio centenar de efectivos, porque es un deporte para especialistas donde cada movimiento y cada jugada están diseñadas al milímetro, así que hay un once diferente para cada situación. Un partido dura una hora, dividida en 4 cuartos de 15 minutos. El reloj no corre de forma continua, sino que se detiene por diversas circunstancias del juego. Un partido normal se alarga hasta las 2.30-3 horas.

La dinámica del juego: ¿Cómo se avanza?

El objetivo principal del juego es que un jugador llegue con la pelota en las manos a la endzone rival. Es lo que se llama touchdown, y vale 6 puntos. Para ello, el equipo que ataca tiene cuatro jugadas -downs- para avanzar 10 yardas. Cada vez que lo consigue, vuelve a tener otras cuatro opciones. Así hasta que, o llega a la endzone y sella el touchdown, o pierde el balón y entonces le toca defender.

Este sería el desarrollo de un down. El equipo se reúne en un corro y se transmite la jugada ordenada por el entrenador. Hay dos maneras de ganar yardas: la carrera y el pase. El center -ese que al comienzo de cada jugada está agachado con el balón apoyado en el suelo- se la pasa entre sus piernas al quarterback, el director de orquesta del equipo. Y éste se la da a alguien para que avance con la pelota lo más lejos que pueda o lo lanza a alguno de los compañeros que han salido corriendo disparados.

Con lo primero hay menos riesgo de perder el balón, pero se avanza menos. Con lo segundo se puede adelantar mucho más, pero también es más fácil que el balón sea interceptado por el rival. Puede ser que el quarterback corra con el balón sin dárselo a nadie, pero no es lo más usual y suele ser más bien un recurso cuando no hay otra jugada clara. Cada jugada finaliza cuando el portador del balón es placado o hay un pase marrado y el balón toca el suelo. Evidentemente, el equipo que defiende intenta impedir los avances del rival y, si puede, robarle el balón.

Otras anotaciones: ¿Cuánto valen?

Logrado el touchdown hay dos opciones para aumentar el premio. La primera es el extra point, una patada entre los palos sencilla -se marra muy pocas veces- y que otorga 1 punto más. La otra opción, utilizada sólo si no queda más remedio, es la conversión de 2 puntos, consistente en intentar llevar de nuevo el balón hasta la endzone en una sola jugada desde la yarda dos del equipo contrario. Cuando el equipo que ataca ve que se le agotan las posesiones y no va a poder avanzar diez yardas, suele optar, si está lo suficientemente cerca, por intentar un field goal. Es una patada que, en caso de que la pelota pase entre los palos, se premia con 3 puntos. Si el intento de field goal no es factible se da una patada defensiva para tratar de que el rival comience su turno de ataque lo más lejos posible de la endzone propia. Existe una última manera de anotar, que es la de placar a un rival cuando tiene el balón en su propia endzone. Es muy poco habitual, se llama safety y vale 2 puntos.

Los pañuelos amarillos

Por muy salvaje que pueda parecer, no todo esta permitido. Cuando un arbitro observa que se ha cometido una infracción, lanza al terreno de juego un pañuelo amarillo que lleva en el bolsillo. Entonces, el árbitro principal detiene el juego y consulta con su compañero. Acto seguido, el colegiado principal explica, tanto por gestos como de viva voz a través de un micrófono, qué ha pitado y por qué, para que tanto jugadores como público lo sepan.

Esperemos que con esta pequeña guía puedan disfrutar del espectáculo.