Piden un año de cárcel contra un joven de Iruñea por denunciar una agresión policial en 2007
GARA |
Los hechos, como recordaron ayer desde la comisión de fiestas de Arrosadia, ocurrieron en las fiestas de 2007 de este barrio iruindarra, cuando policías forales «guiados por policías municipales conocidos por su odio a los movimientos sociales», propinaron «una brutal paliza» a la treintena de personas que se encontraban en el recinto de txosnas el domingo por la mañana.
«Al parecer, antes de que se personaran en el recinto, los policías habían paseado por el barrio provocando altercados» explicaron desde la comisión, señalando que «la carga policial ocasionó numerosos heridos, y unas diez personas fueron atendidas en el hospital». Testigos de la carga relataron que «disparaban incluso a menos de tres metros de distancia».
Once denuncias, un juicio
A raíz de esta actuación policial, un total de once personas presentaron denuncia ante el Juzgado de Guardia de Iruñea, apoyándose en fotografías y partes médicos. Sin embargo, todas ellas fueron desestimadas y archivadas, aun cuando fueron recurridas en varias ocasiones. Pero sobre lo sucedido aquel domingo sí se va a celebrar un juicio, precisamente contra un joven acusado de «atentado a la autoridad», con petición de un año de cárcel, «simplemente por encontrarse en el lugar de los hechos y ser reconocido por su trabajo en favor de los gaztetxes».
A este respecto, denunciaron que este juicio «además de un claro ejemplo de impunidad policial, es parte de la dinámica llevada por UPN en contra del movimiento popular de la ciudad». Un movimiento que es «parte de la vida activa» de Iruñea y que con sus reivindicaciones «pone en cuestión el modelo de ciudad creado por y para una sociedad de pensamiento único».
Desde la comisión de fiestas de Arrosadia denunciaron también el modelo de fiestas que desde el consistorio se está aplicando a la ciudad. «Esta política de UPN es un modelo autoritario, no participativo ni plural, y donde tiene cabida desde las multas hasta una normativa que tiene como objetivo imposibilitar en muchos casos la organización y realización de unas fiestas populares», criticaron.
A este respecto, valoraron que «es tal el empeño en entorpecer las fiestas populares, que no dudan en utilizar, incluso, la violencia física, en este caso representada en la actuación de la Policía Foral y municipal». Así, apuntaron que el próximo miércoles, día 4, se celebrará «un nuevo juicio provocado por la violencia municipal y foral, bajo el mandato de UPN, que en el día a día de la ciudad nos oprime de manera asfixiante» e hicieron un llamamiento a concentrarse el día del juicio, a las 9.00, frente a la audiencia provincial.