Caja Laboral ha logrado un beneficio neto de 100,5 millones de euros en 2008, lo que supone un descenso del 45,6% debido fundamentalmente a los efectos negativos de la quiebra del banco de inversión estadounidense Lehman Brothers, en el que la cooperativa de crédito tenía invertidos 162 millones de euros.

El presidente y el director general de Caja Laboral, Juan María Otaegi y Elías Atutxa, respectivamente, acompañados por los máximos directivos de la entidad, presentaron en Arrasate los resultados de 2008 y las perspectivas para 2009, cuando esperan que el beneficio después de impuestos vuelva a rondar los 100 millones de euros.

Esta caja, perteneciente a la Corporación Mondragón, reconoció el pasado mes de setiembre que los 162 millones de euros que tenía invertidos en «bonos senior» de una entidad holandesa subsidiaria de Lehman Brothers afectarían a la cuenta de resultados de 2008, en la que figura también una bajada del 51,6% de los beneficios brutos, que se situaron en 101 millones.

Elías Atutxa dijo que la quiebra de Lehman Brothers provocó que el beneficio neto se haya reducido en 75 millones de euros en esta entidad guipuzcoana, que llevaba «15 años de crecimientos ininterrumpidos de dos dígitos» y que, no obstante, espera recuperar un 25% de lo invertido.

Otaegi señaló que en 2008 ha habido una «sombra importante», pero deseó que no oculte otras «muchas luces» en un ejercicio en el que el crecimiento de recursos en el balance ha sido del 11,8%, el del crédito del 10,5% y la morosidad se ha situado en el 2,21% a pesar de que la media del sector «ronda el 4,1%», precisó.

En 2009, según expresó Otaegi, la cooperativa de crédito espera que la morosidad alcance el 5,5% en Caja Laboral y que pueda fijarse entre el 7% y el 8% en el sector. A su juicio, afectará a todos los segmentos.

En 2008, Caja Laboral culminó el proceso de expansión de la entidad con la apertura de doce sucursales, la mayoría en el cinturón periférico de Madrid, con lo que finalizó el año con 401 oficinas, de las cuales 145 están en la red de expansión, 1.976 socios y 1.185.672 clientes.

En 2009, destinará más de 3.000 millones a las empresas y reforzará su compromiso con las familias dedicando 1.000 millones a hipotecas y 350 millones a préstamos para el consumo, mientras que 350.000 clientes tendrán créditos concedidos de antemano por valor de 5.000 millones.