Clara Gangutia inaugura hoy en Donostia una exposición llena de paisajes y gran colorido
Clara Gangutia nació en Donostia pero a los cinco años se fue a Madrid. Aunque trabaje allí, los paisajes de Euskal Herria siguen presentes en sus obras. Esta tarde inaugura su nueva exposición en Ekain Arte Lanak.
Ane ARRUTI | DONOSTIA
La última vez que Clara Gangutia expuso en Donostia fue hace tres años, en la Galería 16. En esta ocasión, la pintora nacida en la capital guipuzcoana y residente en Madrid, ofrece una colección de dieciséis trabajos, pintados la mayoría desde aquella última exposición.
Son trece óleos y tres dibujos realizados con la técnica del grafito, que parten de una fotografía. La exposición, que permanecerá en Ekain Arte Lanak de Donostia hasta el 15 de abril, abrirá sus puertas al público a las 19.30 de esta tarde. Ayer pudimos hablar con ella mientras ultimaba todos los detalles.
Naturaleza realista
En los cuadros llenos de colorido, Gangutia ha pintado en tono realista paisajes tanto montañosos como marítimos que tanto aprecia. En tres lienzos que ha colocado uno tras otro se ve la bahía donostiarra mirada desde el Peine del Viento. «Siempre he estado ligada al País Vasco. La familia, los paisajes, el mar... Tengo lazos afectivos muy fuertes aquí». Muestra de ello son los paisajes inmortalizados de los alrededores de Hernani, Zumaia y Astigarraga. También incluye paisajes urbanos de Bilbo, Roma o Estambul.
La muestra sigue la línea característica de Gangutia, siempre fiel a su estilo realista. «Mi evolución es algo muy gradual. Si ves los cuadros que pintaba en los años setenta sí que se nota la diferencia, pero es algo paulatino, sin cambios bruscos», dijo. Como también ha hecho hasta ahora, no ha querido agrupar la muestra bajo un nombre. «No me suele gustar poner ningún título a las exposiciones. Hay gente que hace series, o le llaman `proyecto' a una exposición. Yo para eso soy un poco anárquica», explicó.
De las dieciséis obras que expone en Ekain Arte Galeria, Gangutia confesó que tienen un sentido para ella especialmente dos de ellas: «El cuadro de Estambul me gusta mucho pero, sobre todo, me gusta el último que he pintado. Lo he realizado en condiciones familiares muy difíciles, y es curioso el resultado porque es un cuadro con mucha calma, todo lo contrario a lo que yo estaba pasando entonces». Tras la visita a Donostia, volverá a Madrid, donde tiene su estudio de trabajo, para realizar otra exposición con otros trabajos que tiene acumulados.
