Jóvenes independentistas comparecieron ayer en Bilbo junto a Ugaitz Elizaran, Gartzen Garaio y Garikoitz Etxeberria, condenados en el sumario contra Jarrai, Haika y Segi recientemente excarcelados tras cumplir seis años de prisión. Pretendían visualizar así que la represión contra el movimiento juvenil ha fracasado en su objetivo de «cortar» el relevo generacional.

Jon Telleria ejerció de portavoz de los jóvenes independentistas e inició la rueda de prensa dando la bienvenida a quienes han quedado en libertad en las últimas semanas y enviar, asimismo, un abrazo solidario a los que siguen en la cárcel, además de a todos los presos políticos vascos.

«La foto de hoy muestra en cierto modo que el fin último de la represión, que sería cortar el relevo entre generaciones a la hora de sumarse a la lucha, ha fracasado», aseguró. A su vez, añadió que «la prueba del fracaso de ese fin es que miles de jóvenes independentistas sigan organizándose a día de hoy a favor de la independencia y el socialismo».

Elizaran, Garaio y Etxeberria, por su parte, quisieron refrendar ayer que su compromiso en la lucha a favor de la independencia sigue vigente tras cumplir seis años en prisión por el trabajo político realizado en el movimiento juvenil vasco.

Elizaran destacó en nombre de todos ellos, «el orgullo» que les produce ver a nuevas generaciones de jóvenes «organizados y trabajando» por la independencia y el socialismo a pesar de la crudeza de la represión.

En este sentido, insistió en que ha quedado demostrado que las vías represivas son «inútiles» y «no llevan a ningún lado» porque no han conseguido romper el relevo generacional. «Si no lo han conseguido ahora, seguro que en adelante tampoco lo van a conseguir», añadió.

Banda armada, sin armas

El joven ex preso señaló que, al igual que ocurre hoy en día, conocían antes de ser detenidos y encarcelados que la militancia y la lucha tienen un «coste», pero que «terminada esta fase que nos ha tocado vivir no vemos motivos para echarnos atrás».

«Nos han hecho pagar seis años de cárcel para que nos arrepintiéramos de trabajar por la independencia, el socialismo y una Euskal Herria libre, pero venimos a corroborar que nuestro compromiso sigue vigente y sigue siendo el mismo que el primer día», sentenció.

Elizaran declaró que se sienten orgullosos de haber pertenecido al Colectivo de Presos Políticos Vascos y recordó que al igual que ellos «muchos otros miles de compañeros han conocido las garras del Estado y las cárceles del enemigo en toda su crudeza».

Asimismo, se refirió a que en la actualidad los jóvenes siguen sufriendo una gran represión por el mero hecho de organizarse y estar en el «punto de mira» supone poder ser detenido, torturado o encarcelado «sólo por trabajar por los derechos de la juventud con un objetivo independentista». «Te pueden acusar de pertenencia a banda armada sin tener armas, como nos han hecho a nosotros», añadió con ironía.

«Luchar es carísimo»

A pesar de las consecuencias que han padecido, Elizaran subrayó que la lucha que llevaron a cabo en su momento y la desarrollada durante años por miles de compañeros de forma desinteresada «nos ha llevado a Euskal Herria a la situación actual en la que se vislumbra un cambio inmediato y que va a suponer un avance». «Hace unos años nadie se creería que podíamos estar así», declaró.

Por su parte, Telleria también destacó que es la lucha la que ha traído a Euskal Herria «a este escenario de estar a las puertas del cambio», aunque reconoció que «en este pueblo es carísimo luchar por la independencia y el socialismo».

En este sentido, recordó a todos los jóvenes que son «obligados» a presentarse ante la Audiencia Nacional española, como ha ocurrido en las últimas semanas con el caso de los 22 jóvenes de Oarsoaldea o los 12 de Iruñerria. Además, recordó que tratan de imponer una condena de 38 años contra Hodei Ijurko.

A juicio del portavoz de los jóvenes independentistas, con estas actuaciones les quieren «sacar de la calle» porque son «la alternativa a este modelo social, a esta situación de opresión y nos parece evidente que somos el obstáculo principal para quien pretende cerrar las puertas del cambio y mantener esta situación de opresión».

Censuró que el PSOE ha pactado en Nafarroa con UPN y en la CAV con el PNV «eternizar el modelo capitalista». En este sentido, acusó al partido que lidera Miguel Sanz de «vender» Nafarroa al Estado español y afirmó que el 2 de marzo «veremos a PSOE y PNV de la mano formando un nuevo gobierno y creando un nuevo estatuto que cerrará todas las oportunidades a Euskal Herria». Como prueba de ello señaló que en los últimos cuatro años han aprobado proyectos y presupuestos de forma conjunta.

Por ello, pidió a los jóvenes que se sumen al voto «rebelde» que supone D3M, y que participen en la campaña denunciando «este circo electoral mediático que nos pretenden vender como si fuese un ejercicio normalizado de democracia y mostrar que Euskal Herria no está en venta».

Asimismo, Telleria realizó un llamamiento a la juventud vasca a que se sume a la dinámica por la independencia en cada pueblo para hacer frente al actual modelo de opresión y crear una nueva Euskal Herria que sea socialmente justa.