Elecciones del 1 de marzo
El PSE no se fía del sondeo de Lakua que sitúa a López casi en Ajuria Enea
R.S. | iRUÑEA
A Patxi López le bastaría con recibir los votos del PP para ser lehendakari si se cumple el vaticinio del sondeo del Gabinete de Prospección Sociológica del Gobierno de Lakua, que se hizo público ayer. Se trata de un estudio con más entrevistas que las del CIS estatal (3.332 encuestas) y que ha sido realizado más cerca de las elecciones (entre el 5 y la 16 de febrero), por lo que cabe atribuirsele más fiabilidad. En el resumen entregado a los medios no se aportan los datos directos de las respuestas dadas por los encuestados, lo que impide comprobar cuál es su grado de «cocinado».
El PNV vencería con 27 escaños, pero el PSE quedaría a solo uno de distancia y desbancaría a Ibarretxe con el apoyo seguro de los trece parlamentarios atribuidos al PP. El PNV no podría formar mayoría con la fórmula actual, dado que los cuatro votos de EA, los tres de EB y los dos de Aralar producirían una suma de 36, a dos de alcanzar la mayoría absoluta. Ibarretxe sí podría gobernar si Patxi López renuncia a presentar candidatura al no haber ganado las elecciones o si se produce un pacto entre ambas formaciones.
Curiosamente, el sondeo fue acogido con desconfianza por el PSE, en la medida en que puede suponer un «aviso a navegantes» que active el voto en torno a Ibarretxe. El PNV lleva toda la campaña haciendo ver a su gente que «hay que despertar».
Así, Patxi López, candidato a lehendakari, huyó de cualquier atisbo de confianza: «Estamos convencidos de que esos resultados se van a mejorar. Queda una semana, que para nosotros es decisiva. Nunca en la historia de Euskadi el PSE-EE había estado en esa posición». Para ello, sin embargo, recalcó que hay que movilizarse «al máximo».
Miedo a la polarización
«Hay otros que se pasan todos los actos y mítines llamando a los batzokis para que se movilicen, se les ve un poco dormidos según dicen. Será que no les entusiasma mucho el candidato y las propuestas», dijo López.
Las formaciones minoritarias, por su parte, se centraron en denunciar el efecto de polarización que traslada esta encuesta. Unai Ziarreta, de EA, advirtió ante «un intento de polarizar el voto mediante el miedo a una alianza PP-PSE-UPyD». Y subrayó además que «el acuerdo que se va a producir es entre PNV y PSE», porque a Zapatero le interesa también contar con los votos jelkides en Madrid. En cuanto a su resultado, saludó con ironía que EA está mejorando, «porque hace dos semanas nos daban dos escaños y ya estamos en cuatro».
Para el candidato de EB, Javier Madrazo, lo que este sondeo evidencia es que es muy factible un pacto entre PP y PSE: «López se ha encargado de no desmentirlo, se ha encargado de no decir que no va a aceptar los votos del PP para ser lehendakari».
PNV
El presidente del PNV en Araba, Iñaki Gerenabarrena, acusó al PSOE de utilizar las competencias y las necesidades ciudadanas como «presas políticas para intentar sacar rendimientos propios». Recordó que el partido de Rodríguez Zapatero «no ha hecho una sola transferencia» en este periodo salvo en los casos en que ha necesitado el apoyo del PNV en Madrid y las ha cedido como «un coste político». Por ello, se mostró molesto por la afirmación de Txarli Prieto, su homólogo del PSE alavés, de que «ellos protegerán el autogobierno».
Por su parte, Juan José Ibarretxe estuvo en Arrasate para participar en un acto en favor de las energías renovables, en concreto en la falda del monte Udalaitz. Allí se marcó como objetivo «ambicioso» que en 2013 la CAV pueda generar el equivalente al consumo energético de todos los hogares. Prometió para ello duplicar la inversión en I+D+I hasta alcanzar los 20.000 empleos en este sector, de los que 4.000 serían en el campo de las energías limpias. Propuso además la creación de «anillos verdes» en las localidades que tengan más de 5.000 habitantes.
PSE
El PSE centró su acto matinal en prometer apoyo a los consistorios, a los que Patxi López afirma que Juan José Ibarretxe «ha dado la espalda». Para ello estuvo en Donostia junto al primer edil de su partido, Odón Elorza, y expresó compromisos como apoyar la candidatura donostiarra para ser Capital Europea de la Cultura en 2016 (nominación a la que aspira también Iruñea). Habló además de crear una Agencia Cultural Metropolitana con sede en la capital guipuzcoana pero que se proyecte hasta Bilbo y Baiona. Y planteó otras ideas como convertir Tabakalera en un centro internacional de cultura audiovisual o hacer del Palacio de Aiete una Casa para la Paz y los Derechos Humanos. Aseguró que si llega a Lehendakaritza apoyará decididamente «estas propuestas para hacer país».
PP
Antonio Basagoiti, candidato a lehendakari por el PP, afirmó en Gasteiz que con el voto a su partido no peligra el autogobierno y se garantizará el empleo, por lo que pidió el voto a los desempleados y a quienes están preocupados por su futuro laboral. También se ofreció como candidato para autónomos, comerciantes o dueños de empresas familiares, porque afirmó que tiene recetas para ayudarles, entre ellas «bajadas de impuestos y austeridad». Para todo ello, Basagoiti compareció en el polígono industrial de Betoño, donde visitó una empresa.
EA
EA desplazó su campaña a una zona en construcción de las afueras de Gasteiz para reclamar que la política de vivienda se ajuste a las necesidades reales. Unai Ziarreta, aspirante a lehendakari, reclamó un análisis de las necesidades antes de construir, al considerar que actualmente «se hace demasiada demagogia». Como complemento, planteó la necesidad de ampliar la vivienda de alquiler social para los jóvenes y defendió también una modificación en el sistema de adjudicación de viviendas públicas por parte de Etxebide porque «la suerte no puede ser un factor decisivo en un tema tan importante».
EB
Ezker Batua hizo apología de la república y el federalismo en una comparecencia en Bilbo en la que criticó la dejación del PSE en estos terrenos. Respaldado por afiliados, Javier Madrazo puso el acento en que EB «nunca dará por buena la monarquía, porque somos una formación republicana de convicción y de corazón». Así las cosas, instó al PSOE a «recuperar su historia republicana, a la que renunció en la transición, aceptando las imposiciones de la derecha y de los poderes fácticos». En cuanto al federalismo, dijo que puede ser la solución para el contencioso político.
Aralar
Mikel Basabe, cabeza de lista en Araba, pidió que no se dé «ningún paso atrás» en la normalización del euskara, más aún cuando el camino «no se ha andado por completo» pese al «consenso de 1982 y sus potencialidades». En concreto, Aralar propone que las administraciones, incluidas las locales, aumenten su dotación en esta materia, de modo que «todos los alumnos de 16 años sepan los dos idiomas oficiales al finalizar el periodo de educación obligatoria». También reforzar UEMA y sacarlo de la «bronca política».