Las reacciones a la presentación de la nueva oferta educativa del Departamento de Educación del Gobierno de Nafarroa en Primaria y Secundaria no se han hecho esperar. Tanto el sindicato LAB, como Sortzen y la izquierda abertzale coincidieron ayer en señalar que el objetivo de este nuevo modelo es debilitar la enseñanza euskaldun.

A través de dicha reforma se añadirán más horas lectivas en inglés en Educación Primaria y Secundaria, utilizándolo como lengua de instrucción en otras materias. De ese modo, en los centros de modelo A y G se impartirán en inglés el 40% de las horas lectivas, mientras que en el modelo D serán el 30%. En Secundaria, se fomentará el aprendizaje en inglés y francés

Desde el colectivo en favor de la escuela pública vasca Sortzen recodaron que los pedagogos recomiendan «no introducir un tercer idioma en los modelos bilingües, ya que sale perjudicada la lengua minorizada y no se logran grandes mejorías en la lengua extranjera». «Según aseguró el consejero de Educación Carlos Pérez-Nievas, los alumnos que estudien los modelos TIL que él propone lograrán un nivel B2 en inglés, pero se le olvidó mencionar que eso es algo que ya consiguen el 66% de los alumnos que cursas sus estudios en modelo D. Entonces, ¿por qué ahora quiere extender los errores del modelo A y G al modelo euskaldun?», se preguntaron a este respecto.

Llamamiento

Asimismo, desde este colectivo denunciaron que el Ejecutivo de Miguel Sanz toma como excusa el potenciamiento de la enseñanza en inglés para arremeter contra la lengua vasca. «Si bien durante décadas el euskara ha aflorado gracias al modelo D, en los últimos años no cesan los ataques por parte del Gobierno», lamentaron. Por ello, hicieron un llamamiento para acudir a la manifestación que se celebrará en Iruñea el próximo 6 de marzo en favor de la enseñanza euskaldun en el herrialde.

El sindicato LAB por su parte denunció que el modelo TIL «ha sido puesto en marcha para ahogar la expansión del modelo D», y añadió que esa propuesta «no tiene base legal que lo regule ni que lo desarrolle». Además, señalaron que las exigencias a los docentes «están muy lejos de la profesionalidad».

Desde la izquierda abertzale criticaron que el objetivo final este nuevo modelo lingüístico «no es otro que el arrinconamiento del euskara».