Aurora Beltrán celebra sus 25 años de historia con «Clases de baile»
Han transcurrido 25 años desde que la chica de la mirada azul se viera envuelta en Belladona, después Tahúres Zurdos. Hoy baila con su pasado y su futuro, pues hay nuevas canciones, disco y más vida.Pablo CABEZA | BILBO
Que una mujer rockera haya podido perseverar y mantenerse con brillo a lo largo de 25 años es un milagro o un fenómeno de misterio, uno de de esos que aparecen en «Cuarto Milenio». En cualquier caso, Aurora Beltrán no es alienígena, todo lo más prestidigitadora, pues sólo con magia (en realidad talento) se puede mantener una compositora, intérprete y vocalista 25 años en la escena del rock, espacio repleto de ejecutivos, machos y sujetos que por el hecho de estar ante una mujer creen que pueden ningunear. Aurora Beltrán ha vivido rebeliones en el propio barco (los demonios hundieron Tahúres Zurdos). Ha conocido la crueldad de las multinacionales, con amores en las primeras firmas y desprecios posteriores al no bailarles la letra pequeña. Le han regalado una rosa y negado un menú del día. Ha girado sin descanso y no le han dejado cama. Encontró el amor verdadero y en poco tiempo se perdió.
El año pasado Batiendo Records le publicó «Clases de baile», por fin, la apuesta en solitario de Aurora Beltrán. Con el nuevo álbum se abrió un esperanzador camino hacia las luces, pero el sello se empeñó en chapucear: escaso apoyo, títulos de las canciones en desorden, dejadez... Un sinfín de descuidos que obligaron a la brillante guitarrista e inspirada compositora a poner de nuevo la vela en rumbo, de tal modo que decidió recuperar la propiedad del máster y editarlo por su cuenta con el acabado idóneo; objetivo que logró no sin un considerable esfuerzo físico, mental y económico. Pero ahora sí, ahora se encuentra en la calle el «Clases de baile» verdadero, el gestado con tacto, inspiración y mimo, justo el que esta noche presentará en Iruñea al lado de lo que dé de sí su pasado, pues en dos horas no se pueden condensar las doscientas veinte mil que lleva en activo.
Pasado
Aurora Beltrán comenzó su carrera artística tocando en bandas de baile, siendo una jovencita. En la mita de la década de los ochenta se involucró en una de las primeras formaciones de chicas de Euskal Herria, Belladona, que materializó su existencia con «Las mujeres y los negros primero», elepé de considerable éxito publicado en 1986 por Soñua. Diferencias personales acabaron con el conjunto. En el 88, Tahúres Zurdos emergió con fuerza. «El chico de la mirada asustadiza» (diciembre de 1988), «Lujuria» (mayo de de 1989), «Una noche de amor» (marzo de 1990) o «Mis hijos me espían» (julio de 1990) son singles que empujaron con fortaleza el nuevo proyecto. Ese mismo año, 1990, TZ concluyó su relación con Oihuka para fichar por la multinacional EMI, a la que siguieron RCA, Arcade y Epic/CBS, ya en el año 2000.
Tras la finalización de la gira «Otra noche sin dormir», junto a Rosendo y Barricada, con claros y oscuros, es tiempo de soñar, de encontrarse con ella misma y la generosa capa de valores que la envuelven. Cita artística que ocurrirá esta noche a partir de las 20.00 h., en el teatro Gayarre de Iruñea.