El día después llega con un anticipo de lo que está por venir. O lo que es lo mismo, pero sin trabalenguas, los dos equipos recién clasificados para disputar la próxima final de Copa se las ven hoy en el Camp Nou.

Pero como sucediera el pasado sábado con el encuentro entre Athletic y Sevilla, el de esta noche poco o nada tendrá que ver con el que enfrente a los rojiblancos con el Barcelona el próximo 13 de mayo. Más que un ensayo general, lo del estadio blaugrana parecerá uno de esos documentales de sobremesa que todos dicen ver pero no se comen una rosca en los shares de audiencia: una lucha en la selva entre un león resacoso y un guepardo con cojera.

Por mucho trabajo de recuperación, física y mental, que hayan realizado los rojiblancos, parece difícil prever la mejor versión del Athletic para esta noche. Y, para los malpensados, no tiene nada que ver con fiestas, sino con el esfuerzo descomunal, el previo de mentalización y el físico sobre el césped, que tuvo que realizar el equipo para conseguir el billete para la final copera.

No parecen las mejores circunstancias para visitar al Barcelona. Por mucho que el guepardo, tras una espectacular carrera que le ha llevado a batir todo tipo de récords durante meses, lleve algunas semanas con cojera. De hecho, no cabe descartar que los catalanes se hayan vuelto a afilar las uñas. A la pieza, que parecía tener prácticamente asegurada, le ha salido otro serio pretendiente, con un Real Madrid que también se acerca a la carrera y el Barcelona necesita recuperar terreno y despejar dudas de inmediato.

Además, Pep Guardiola -aunque pensando también en su próxima cita europea ante el Olympique- reservó el miércoles a algunas de sus estrellas, que regresarán al once esta noche. Claro que no todo es color de rosa para el técnico catalán. Lesiones y sanciones han mermado su defensa, lo que incluso le ha llevado a incluir al jugador del filial Alberto Botía en la convocatoria previa.

También habrá novedades en el once rojiblanco. Forzosas -Ocio, David López y Ion Vélez se quedaron en Bilbo, con diferentes problemas físicos- y voluntarias. Relativas estas últimas porque la posible suplencia -no hay nada claro al respecto- de hombres como Javi Martínez o Toquero se debe más al esfuerzo que realizaron el miércoles que a un capricho de Joaquín Caparrós. Las puertas del equipo se abrirán así a jugadores como Etxeita, Gurpegi o Garmendia e incluso Iñaki Muñoz, por segunda vez esta temporada, forma parte de la expedición.

Pese a las circunstancias en que afronta el choque, el técnico deja claro que su equipo intentará «hacer un buen partido». Recuerda, además, que el Athletic tiene por delante una obligación y un deseo: la primera, sumar «lo antes posible los diez u once puntos» que necesita para asegurar la permanencia y el segundo, «mejorar la clasificación del año pasado». Ni coyuntura, ni rival, por tanto ejercen como excusa previa para Caparrós.