Liga de Campeones
El Portland se juega los cuartos ante el Handbold danés
Al equipo navarro le basta un empate ante un rival que no ha logrado sumar un punto en esta fase de la competición. Han viajado a Copenhague con las bajas de Davor Dominikovic, Nikcevic y Vugrinec.
GARA | IRUÑEA
El Portland afronta hoy la última jornada de esta fase de la Liga de Campeones dependiendo de sí mismo para lograr la clasificación para los cuartos de final, ya que un empate o una victoria ante el FCK Handbold le bastaría para superar en la clasificación al Chehovskie ruso.
El conjunto antoniano, que partió a tierras danesas ayer con dos horas de retraso en el vuelo por las inclemencias meteorológicas, acude a Copenhague con las bajas ya conocidas de Davor Dominikovic, Ivan Nikcevic y Renato Vugrinec, si bien viajaron con el resto de la expedición navarra el lateral Lars Jorgensen y el pivote Ratko Nikolic, ambos con molestias.
Nikolic, que terminó el encuentro frente al Hamburgo con una fuerte contusión en el muslo, no se ha entrenado esta semana y es el que más preocupa al técnico, Chechu Villaldea. «Si no puede jugar perderíamos una baza muy importante tanto en ataque como en defensa», dijo, mientras que Jorgensen, aquejado de una contractura en la espalda, mejoró ayer notablemente y podrá jugar.
Consciente de que el Portland, tras la derrota del Chehovskie en Hamburgo (32-31), tiene en su mano la clasificación para los cuartos de final, Villaldea aseguró que el equipo afronta este decisivo choque «con la máxima ilusión, pero sin confianzas porque el Handbold, pese a no jugarse nada, es un gran equipo y no querrá despedirse de la Liga de Campeones sin victorias».
El conjunto danés no ha logrado sumar un sólo punto en esta fase de la máxima competición continental y, aunque el Portland le superó en Iruñea con facilidad por un contundente 38-27, Villaldea insistió en la necesidad de no relajarse y la dificultad de puntuar fuera de casa en Europa: «Tienen un equipo plagado de internacionales, veteranos y con experiencia».
«Seguro que no estarán contentos con la fase que han hecho y querrán marcharse de Europa dejando un buen sabor ante su afición. No obstante, nosotros queríamos llegar a la última jornada con opciones y vamos a salir a por todas y a ganar, sin especular con el resultado».
En lo que respecta al conjunto que dirige Magnus Andersson, el entrenador gijonés destacó su velocidad y poderío en el lanzamiento: «Son muy rápidos y en segunda oleada muy efectivos. Están haciendo muchos goles y seguro que nos pondrán las cosas difíciles. Cuentan con dos extremos muy rápidos y con buena finalización como Atterhall y Christensen y una buena salida al contraataque de la mano del sueco Martin Boquist».
La convocatoria estará formada por Svensson, Saric, Ruesga, Jakobsen, Jorgensen, Kjelling, Malmagro, Hernández, Masachs, Urdiales, Crowley, Juancho, Nikolic y Mindegia.
El Arrate ve en su compromiso de hoy frente al Teucro una oportunidad para distanciarse de la zona de descenso de la liga Asobal. El visitante pontevedrés, con sólo 9 puntos, marca la frontera con el descenso y los de Eibar tienen 12, por lo que en caso de vencer abrirían una brecha de cinco puntos y además decantarían de su lado el balance particular tras el 26-26 de la primera vuelta. «Es el primer partido de una fase de la Liga que para nosotros será más suave que hasta ahora», recordó Julián Ruiz, ya que vienen de enfrentarse al Barcelona y Ciudad Real, mientras que en el futuro se medirán a muchos de los peores clasificados.
El preparador del Arrate considera «importantes» los dos puntos en juego, y también «iniciar una línea de rendimiento más regular». A pesar de la precaria situación del rival, Ruiz desconfía y advierte de que no se pueden «relajar», a la par que comprende el estado anímico de un plantel teucrista, en huelga durante la semana por los problemas económicos del club gallego. «Es una situación muy grave para todos, mala para los profesionales que estamos metidos en este lío y para la propia competición», lamentó Ruiz.
En las filas albiazules causará baja Ivo Díaz, reservado por su entrenador para evitar más problemas en la maltrecha rodilla del cubano. «Su rodilla da problemas y hay que cuidarla», explicó Julián Ruiz, en todo caso seguro de que podrán afrontar el partido con garantías porque «hay equipo suficiente» para ello.