La izquierda abertzale critica el «descaro» con el que actúan UPN y PSN en Nafarroa
Asier VELEZ DE MENDIZABAL |
Los militantes independentistas Mariné Pueyo y Xanti Kiroga comparecieron ayer en Iruñea para valorar las declaraciones efectuadas en las últimas semanas por los dirigentes de UPN y PSN, Miguel Sanz y Roberto Jiménez, acerca de cuestiones como el proyecto urbanístico de Gendulain, la financiación del TAV o las irregularidades contables en el Consistorio de Cintruénigo. A su juicio, «el afán por mantener este modelo de enriquecimiento de una elitista casta» hace que ambos dirigentes «se vean forzados a actuar con el mayor de los descaros».
«Lo que está pasando en Nafarroa no deja de ser una desvergüenza. En cualquier situación sería ya grave de por sí, pero mucho más todavía en ésta, cuando la crisis económica está acarreando consecuencias drásticas para cientos de familias», denunció Pueyo, quien advirtió de que tanto Sanz como Jiménez «ya no se tapan la cara, y no tienen el más mínimo pudor para decir alto y claro cuáles son sus verdaderos intereses».
La electa en el Ayuntamiento de Iruñea bajo las siglas de EAE-ANV criticó que en el caso de Gendulain -donde el Ejecutivo navarro, con el apoyo del PSN, pretende dar 90 millones de euros a los constructores con la excusa de reflotar el sector de la construcción- «todos se han forrado durante los años dorados de la gran burbuja inmobiliaria y ahora pretenden seguir haciéndolo aunque para ello se tenga que actuar contra toda lógica urbanística».
Alertó de que llegado el momento de la crisis, las instituciones navarras «quieren utilizar el dinero de todos para que los directamente implicados salgan de rositas», lo que a su parecer deja en evidencia que «en Navarra es imposible que quien es amigo del búnker del Amejoramiento pueda perder un solo euro».
El TAV y Cintruénigo
Pueyo denunció también la falta de información acerca de las consecuencias sociales y medioambientales que acarreará la construcción del TAV en el herrialde, un macroproyecto cuya financiación UPN y PSN quieren adelantar al Ejecutivo español.
«Ni desde el poder ni desde las instituciones, de donde la verdadera oposición ha sido expulsada, nadie se pregunta si este proyecto responde al interés general de la mayoría de la sociedad, si realmente responde a las necesidades de desarrollo de Navarra, o si, por el contrario, responde al interés de determinadas clases que lo necesitan para seguir engordando sus bolsillos», censuró la portavoz independentista, al tiempo que recordó que el coste de esa macroinfraestructura ascenderá a 3.100 millones, «algo que en palabras de Sanz es sólo una anécdota».
Sobre la decisión de la Fiscalía de la Audiencia de Nafarroa de imputar únicamente al secretario de Cintruénigo, exculpando a los alcaldes de UPN y PSN en la localidad desde 1992, Pueyo apuntó que «es evidente que se intenta cerrar el caso con un cabeza de turco sin demasiado coste personal, sin que aparezca ningún responsable político».