GARA > Idatzia > > Ekonomia

Ultimátum a General Motors y Chrysler para poder acogerse al plan de rescate

p028_f01_148x100.jpg

GARA |

El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, dio ayer un ultimátum a General Motors y Chrysler para que presenten nuevos planes de viabilidad si quieren seguir recibiendo ayudas públicas para salir de la crisis o, bien para que se acojan a la ley de quiebras, aunque aclaró que Washington «no dejará que uno de los pilares de la economía del país se desvanezca».

Durante el anuncio del plan gubernamental para rescatar al sector del automóvil, Obama ofreció un periodo de tiempo adicional y limitado a las dos empresas para que ofrezcan una alternativa que aporte más confianza a largo plazo.

En el caso de General Motors, el presidente anunció un plazo de sesenta días para que la empresa presente un plan de reestructuración más eficiente y que contemple una fuerte reducción de costes porque, según dijo, «aunque en los últimos meses ha hecho un esfuerzo considerable, no es suficiente».

GM no descarta la quiebra

«El Gobierno no tiene interés ni intención de dirigir General Motors», advirtió Obama, quien propuso a la compañía de Detroit mejorar su propuesta «no para sobrevivir sino para liderar la industria del futuro» y poder acogerse a nuevas ayudas del plan de rescate, cuya cantidad no especificó, además de confirmar la dimisión de su presidente, Richard Wagoner.

Obama dejó entreabierta la posibilidad de que ambas empresas tengan finalmente que recurrir a la ley de quiebras para declararse en bancarrota y poder reestructurarse con mayor facilidad. General Motors dejó entrever una posible declaración de bancarrota al señalar que, aunque preferiría reestructurarse «fuera de los tribunales», la empresa «tomará cualquier paso necesario» para tener éxito.

GM dijo que aprovechará los próximos 60 días para mejorar su viabilidad a largo plazo, «incluida la reestructuración de las obligaciones financieras con los tenedores de bonos, sindicatos y otras partes interesadas». En el caso de Chrysler, Obama reconoció que su situación es incluso «más difícil» ya que necesitará un socio para sobrevivir, tras lo cual ofreció un plazo de 30 días para que formalice una alianza con el grupo Fiat a cambio de un nuevo crédito blando de 6.000 millones de dólares para poder seguir operando.

Poco después de la intervención de Obama, el presidente de Chrysler, Bob Nardelli, anunció que Chrysler y Fiat han alcanzado un acuerdo sobre una alianza global, aunque reconoció que «todavía hay que resolver obstáculos sustanciales», lo que acerca el acceso a la ayuda pública.

Chrysler y Fiat llegaron a un acuerdo provisional a principios de mes, según el cual la empresa italiana recibirá un 35% de las acciones de la empresa estadounidenses a cambio de la transferencia de tecnología, modelos y la capacidad de distribución mundial.

Mucho más sorprendente que la dimisión de Wagoner al frente General Motors para facilitar la generosidad de la Casa Blanca, fue ayer el cese de Streiff en PSA Peugeot-Citroen, por lo efímero de su gestión y la rotundidad sin ningún tipo de diplomacia en su revocación unánime por el consejo del fabricante francés.

Imprimatu 
Gehitu artikuloa: Delicious Zabaldu
Igo