Podría parecer un encuentro como cualquiera de los que ha disputado el Eibar en los últimos tiempos, en los que todo está supeditado a la imperiosa necesidad de ganar.

Y el objetivo principal se mantiene, pero algunos matices diferencian al choque que hoy enfrentará a Eibar y Levante. Para empezar, que las urgencias aumentan cada semana que pasa, complicando el reto azulgrana: siguen siendo siete las victorias necesarias, pero ya sólo doce las oportunidades disponibles. Pero también, y ésto puede interpretarse como una ventaja, el equipo armero se enfrenta por primera vez en mucho tiempo a un rival que no parece tener demasiado en juego.

Aunque quedan muchos puntos por disputar, el Levante es uno de los pocos equipos suficientemente alejados de ascenso y descenso -diez y doce puntos, respectivamente- como para tomarse con placidez los tres últimos meses de Liga. Y aunque un exceso de presión nunca es buen compañero, la motivación por una meta siempre es un factor que se deja notar sobre el césped.

Algo de lo que no anda falto el Eibar, consciente de que se le agota el tiempo. E incluso el «efecto Uribe»: las sensaciones que ha ofrecido el equipo desde su llegada son buenas -aunque éso también sucedía con Carlos Pouso en el banquillo-, pero los resultados se le siguen resistiendo. Y por mucha fortaleza mental que esté exhibiendo la plantilla, la falta de gasolina, en este caso en forma de puntos, siempre acaba dejándose notar.

Uribe protagonizará su cuarto asalto con un equipo similar al que empató en Córdoba hace dos semanas y que, pese a haber dejado escapar la victoria, ofreció un nivel que satisfizo al técnico. Así que Javi Ballesteros, principal novedad en la convocatoria, debutará con la camiseta azulgrana a lo largo del partido porque, de inicio, la responsabilidad ofensiva recaerá en Carlos Rubén -autor del gol en el Nuevo Arcángel, regresa tras cumplir sanción-, Natxo Insa y Paco Sutil en la línea de tres, con Rudy Carlier en punta.

La diferencia respecto a aquel encuentro llegará en los laterales -otra zona que también está creando muchos quebraderos de cabeza-, de los que en esta ocasión se encargarán Jon Urzelai y Raúl García.