El consejero no quería -según él, no podía- perderse el rodaje de la peli que estaban filmando en la cima del Beriain y, debido al mal estado del terreno, no se le ocurrió, bocadillo en mano, subir andando como tantos paisanos acostumbran, sino que cogió el helicóptero de emergencias y en un abrir y cerrar de ojos se encontraba frente a los productores dando «una buena imagen de Navarra». Ayer casi todos los partidos navarros afearon la conducta del consejero de Cultura. Según ellos fue poco ética, un error, falta de austeridad... Sin embargo, a ninguno se le ocurrió que esa actitud del consejero de UPN el 13 de marzo responde a una forma de gobernar caracterizada por el despotismo, la falta de transparencia y la arrogancia, y que podría, incluso debería, ser motivo de dimisión. No obstante, el compañero de partido y de gobierno del consejero lo explicó de forma más sencilla y clara imposible: «Si el helicóptero está libre, lo puede usar», como él mismo ha hecho alguna vez. Ciertamente, el consejero lo habría tenido más difícil si el helicóptero hubiera estado ocupado. «Biutiful» lleva por título el film que se rodaba en el Beriain y despertó la irrefrenable curiosidad del consejero hasta el punto de echar mano al helicóptero de urgencias. Claro que tampoco resulta un medio de transporte extraño cuando el usuario pertenece a la beautiful people.