Los bibliotecarios navarros no están dispuestos a que los cargos políticos impongan sus criterios a la hora de adquirir los fondos para las bibliotecas públicas, por entender que esta labor deben seguir haciéndola los profesionales. El veto de UPN a GARA y «Berria», primero en Barañain y después en Iruñea, está generando una amplia respuesta de los bibliotecarios contra lo que consideran una «injerencia» en su labor profesional.

Así, desde el pasado 24 de marzo no adquieren ningún periódico en las bibliotecas de Iruñea, en coherencia con su convencimiento del «incorrecto y abusivo proceder del Ayuntamiento, que contraviene toda la doctrina bibliotecaria».

Además, consideran que se trata de «una censura contra determinadas publicaciones y un proceder arbitrario en los procesos de selección de documentos que durante años han venido siendo únicos y homogéneos». Así lo recogen en la queja que han presentado al Defensor del Pueblo Navarro contra los ayuntamientos de Barañain e Iruñea y contra el Departamento de Cultura, por entender que su actitud supone un «atropello en el ejercicio de la libertad profesional y una vulneración del derecho y libertad de los ciudadanos a la información».

Los argumentos de ASNABI han sido avalados por el secretario municipal del Ayuntamiento de Iruñea, en cuyo informe hace alusión a las directrices de la UNESCO para el desarrollo del servicio de bibliotecas públicas. En ellas se dice que «ni los fondos ni los servicios estarán sujetos a forma alguna de censura ideológica, política o religiosa, ni a presiones comerciales».

Según estas directrices, «la selección de recursos que la biblioteca pública pone a disposición de los ciudadanos deben reflejar la diversidad de opiniones y experiencias».

También deja claro que es el personal bibliotecario quien debe establecer las normas «de acuerdo con los objetivos de la biblioteca y los intereses y necesidades de la comunidad a la que presta servicio».

Además de llevar este asunto al Ararteko navarro, la junta directiva de ASNABI podrá exponer sus argumentos en el Parlamento de Nafarroa, ya que ha sido convocada formalmente a una sesión de trabajo en la Comisión de Cultura y Turismo. La fecha para esta comparecencia está todavía sin concretar.

Manifiesto en el Día del Libro

De cara al próximo 23 de abril, fecha en que se celebra el Día del Libro, los bibliotecarios navarros han puesto en marcha otra iniciativa por tratarse de una fecha «emblemática y simbólica para la lectura».

Tras reconocer que las bibliotecas públicas de Nafarroa, y en particular las de Barañain e Iruñea, «más que celebrar tienen que lamentar la penosa situación que estamos viviendo», anuncian que van a difundir un manifiesto en favor de «la biblioteca pública para todas las personas».

En este manifiesto hacen una reflexión sobre la importancia de una biblioteca pública gestionada por los profesionales y abierta a todos. Durante los próximos días será distribuido en el Parlamento, ayuntamientos, asociaciones y cuantos ámbitos profesionales locales y estatales puedan alcanzar, «con la esperanza de que este vergonzoso ejemplo para nuestras bibliotecas y localidades no se reproduzca en otros lugares».

Para ello, ASNABI cuenta con la colaboración de la Federación Española de Sociedades de Archivística, Biblioteconomía, Documentación y Museística, que agrupa a 18 asociaciones profesionales de todo el Estado.