Los vampiros que llegaron del frío escandinavo
«Déjame entrar»
La película sueca llamada a revolucionar el cine de vampiros con un realismo poético desmitificador ha sido premiada, entre otros muchos festivales, en Sitges, Donostia, Toronto, Chicago, Boston, San Francisco y Edimburgo. La crítica especializada ha calificado a «Déjame entrar» como la mejor realización del género estrenada internacionalmente el pasado año, siendo Lina Leandersson la actriz revelación en los países nórdicos por su papel de vampira.
Mikel INSAUSTI | DONOSTIA
Se estrenan tan pocas películas suecas en nuestro mercado que hay que estar muy atento a lo que llega con cuenta gotas. Como resultado de esa importante criba aparece de forma muy destacada «Déjame entrar», considerada por muchos expertos en cine fantástico como la mejor creación reciente del género. La dirige Tomas Alfredson, de quien no se ha distribuido ninguna de sus cinco anteriores realizaciones, y que solamente nos suena por ser hijo de Hans Alfredson, antiguo colaborador de Ingmar Bergman. En líneas generales su sexto largometraje es una película de vampiros desmitificadora, pero lo es en el sentido más realista del término, lo que la desmarca de las producciones paródicas anglosajonas. De ahí su absoluta originalidad, ya que no se parece a ninguna otra proposición conocida sobre el tema de los «no muertos», gracias a un realismo poético y un oscuro romanticismo conectado socialmente con problemas actuales como el acoso escolar o la pederastia. No hay efectismo alguno, sino una crudeza visual acorde con un presupuesto que no llegó a los 700.000 euros. Enseguida los norteamericanos se han hecho con los derechos para el obligado remake, adquirido por Matt Reeves, el director de «Monstruoso», en el festival de Tribeca.
El cineasta sueco no tendrá ninguna participación en la versión anglosajona, mostrándose escéptico ante el proyecto. La repercusión internacional se debe a lo exportable del film original, pero se trata de una historia muy localista ambientada en los años 80, dentro de un suburbio de la ciudad de Estocolmo. La niña protagonista es una vampira que ayuda a su joven vecino a enfrentarse a los matones del colegio, un papel sorprendente que ha convertido a Lina Leandersson en la actriz sueca del momento.
«Déjame entrar» es la primera novela del escritor sueco John Ajvide Lindqvist, una atípica historia de vampiros publicada en el 2004. El autor ha participado directamente en la adaptación al cine escribiendo el guión. Su segunda novela, titulada originalmente «Hanteringen av odöda», también va a ser llevada a la gran pantalla. Cambia los vampiros que invaden la rutinaria vida de los suburbios de Estocolmo por zombies, en otro retrato del lado oscuro de la sociedad del bienestar sueca. También tiene publicado un tercer libro, «Pappersväggar», que es una colección de cuentos de horror. M. I.