El portavoz parlamentario del PSE, José Antonio Pastor, pidió ayer al PNV que actúe con «responsabilidad» y no dilate los plazos para que la investidura como lehendakari de Patxi López pueda celebrarse el 4 ó 5 de mayo.

La fecha del pleno de investidura depende de un pleno anterior que estudie las incompatibilidades en las que pueden incurrir los parlamentarios o parlamentarias. De forma autoritaria y sin atender a consejos, la presidenta de la Cámara, Arantza Quiroga, ha fijado ese pleno primer pleno para el jueves, sin esperar a los trabajos previos de la Comisión de Incompatibilidades, presidida por el jeltzale José María González Zorrilla.

Preguntado el dirigente del PSE por la posibilidad de que el PNV retrase los plazos para que Juan José Ibarretxe pueda llegar como lehendakari a la final de Copa del 13 de Mayo, José Antonio Pastor respondió que «lo de la final de la Copa del Athletic, siendo muy importante, sobre todo para mí que soy de Bilbao, no es precisamente la razón fundamental. Lo importante es que este país tenga un gobierno cuanto antes, porque no estamos en la mejor de las situaciones económicas y los periodos de transición es bueno que sean lo más cortos posibles. Yo espero de la responsabilidad de los nacionalistas que no intenten usar en este caso la Comisión de Incompatibilidades para alargar de forma poco razonable unos plazos que pueden ser perfectamente cumplidos dentro de las previsiones que ahora mismo están establecidas».

Pastor hizo estas declaraciones en el marco de una rueda de prensa en la que señaló que el PSE mantendrá en el Parlamento una actitud de diálogo con todos los partidos, pero también de defensa de sus principios. Además, exigió al PNV que no se «instale en la radicalidad» y que «arrime el hombro» sobre todo en las cuestiones esenciales.

Apoyo de UPyD

Rosa Díez anunció ayer que el parlamentario de su partido, Gorka Maneiro, votará a favor de la investidura de Patxi López.

La líder de UPyD habló de un «imperativo moral» y de «apoyo expreso a la democracia» después de que ETA fijara como «objetivo prioritario» al futuro gobierno.