El puerto de la Escrita sirve de divisoria entre los valles de Karrantza y Trucíos. Desde aquí, un largo cordal enfila al Sur hasta encontrarse con la cordillera de los Montes de Ordunte. Vamos a utilizarlo para subir al Burgüeno, que es la primera de las cimas de Ordunte por el Este que supera los 1000 m, y desde allí visitaremos el Kolitza, uno de los cinco montes bocineros de Bizkaia, junto con Sollube, Oiz, Ganekogorta y Gorbeia, desde los que se convocaban a toque de cuerno o bocina las antiguas Juntas Generales del Señorío.

De La Escrita a Burgüeño

Dejaremos el coche en el alto de la carretera (430 m). Es una bonita zona, desde la que se domina el paisaje del gran valle de Karrantza, con los montes de Soba al fondo. El cordal que sigue al Sur no tiene pérdida, con pistas que lo recorren por el flanco oeste, teniendo como telón de fondo la sierra de Ordunte. En suave ascenso llegamos a un collado despejado en el que hay una serie de mojones divisorios (749 m 0,50 h), son los llamados Ilsos de Ribacova, con marcas incisas de 1818. Marcan el punto de encuentro de tres valles: Karrantza, Artzentales y Villaverde. Precisamente el nombre de puerto de la Escrita hace referencia a las marcas de estos mojones y otros que en tiempos hubo en las inmediaciones. Cercanos también se encuentran señalizados una serie de túmulos prehistóricos. A partir de aquí el terreno consiste en anchas lomas herbosas que se empinan al encuentro del cordal principal de Ordunte. A la izquierda divisamos un amplio circo hasta el Kolitza. Esta depresión, llamada Hoya de Ribacova, está poblada por el valioso robledal de Tejea. Afrontamos un fuerte repecho, que salva un desnivel de 300 m. Alguna senda se define entre brezales y vegetación baja. La parte superior es el extremo norte de una loma alargada, que pasando por una antecima nos lleva a los tres buzones y vértice de Burgüeno (1043 m 1,45 h).

Terreros y Kolitza

Ahora nos encaminamos hacia el monte Kolitza. Para ello desandamos la loma superior hasta la antecima, y nos dejamos caer hacia el Este. Salimos a una pista que nos lleva al collado anterior a la siguiente cumbre: Terreros (909 m 2,30 h), con restos de trincheras de la pasada Guerra Civil. Ya vemos Kolitza más cercano. Nos separa el collado de la Nevera (820 m), al que damos bajando una pequeña cuesta. Se llama así por la antigua nevera de la que se surtían Balmaseda y los pueblos de las proximidades. Desde aquí es evidente la ruta a la cima, por un amplio pastizal que nos eleva hasta la ermita de San Roque, con su bella portada románica (874 m 3 h). La ermita cuenta con una gran tradición montañera, tiene un refugio abierto en el lado sur. Están documentadas procesiones a este lugar invocando la protección de los santos contra las pestes que asolaron Balmaseda en el siglo XVI.

Para el regreso volvemos al collado de la Nevera y bordeamos la cumbre de Terreros por una senda a la derecha, en busca del siguiente collado antes de Burgüeno. No necesitamos subir ahora a esta última cima, que hemos visitado anteriormente. La dejamos a nuestra izquierda y atravesamos la despejada cara Norte, en busca del descenso hacia los Ilsos de Ribacova. Desde aquí, sólo nos queda volver al puerto de la Escrita por la ruta que hemos seguido en el recorrido de ascenso (4,30 h).