De haber podido, los equipos vascos habrían caído en una oca el viernes para poder saltarse la jornada, totalmente nefasta para Athletic, Osasuna, Real, Alavés y Eibar. Cinco partidos, cinco derrotas.

Muy dolorosa la del Athletic que, cuando mejor lo estaba haciendo, vio cómo el Depor le dejaba sin premio. Dentro de lo malo, sólo Betis y Espanyol consiguieron la victoria de entre sus perseguidores, con lo que mantiene en cuatro puntos su colchón sobre el descenso, aunque pierde una plaza, cayendo a la 16ª. Sus cuatro próximos compromisos, ante Numancia (nuevo farolillo rojo), Racing (12º con dos puntos más), Sporting (17º con uno menos) y Betis (11º con tres puntos más) marcarán definitivamente el futuro de los rojiblancos.

También perdió posiciones Osasuna, superado precisamente por su verdugo, un Almería que ahora le aventaja en dos puntos, y Mallorca, que salvó un empate en Málaga. Al menos los navarros, como el Athletic, mantienen su ventaja -en este caso de cinco puntos- respecto al descenso. También como la escuadra rojiblanca, están obligados a apretar en las próximas jornadas, vista la dureza del calendario en la recta final de la Liga.

En el resto de la 31ª jornada en Primera destacó el duelo entre Sevilla y Valencia, que una remontada saldó del lado ché. Los andaluces mantienen la tercera plaza, pero ven cómo el equipo de Unai Emery se sitúa ahora a cinco puntos. En la parte alta también destaca el triunfo del Atlético, que aprovechó el tropiezo del Villarreal -acusando su eliminación europea con un empate en Valladolid- para arrebatarle el quinto puesto. Málaga, con un empate, y Deportivo, con su victoria en San Mamés, mantienen sus esperanzas de colarse en puestos UEFA.

Y en la lucha por el título, la diferencia de estilos no se refleja en los marcadores. Barcelona y Real Madrid siguen contando las jornadas por victorias -por la mínima esta vez en ambos casos- y mantienen en seis puntos su diferencia.

Descolgados

El fin de semana ha resultado aún más negativo para nuestros equipos de Segunda, a los que sólo una combinación matemático-milagrosa puede permitir ya seguir pensando en alcanzar sus objetivos. Real, Alavés y Eibar no sólo perdieron, sino que además vieron cómo prácticamente todos sus rivales directos conseguían el triunfo.

Todos, en el caso de los donostiarras. Es decir, los cinco primeros, -Xerez, Tenerife, Rayo, Hércules y Zaragoza, además del Salamanca, que adelanta al equipo de Juanma Lillo-, con lo que la desventaja de la Real respecto al tercer puesto alcanza los nueve puntos. A tenor del ritmo que marca el vagón de cabeza, y teniendo en cuenta que ya hay una decena aproximada de equipos en tierra de nadie, los txuriurdines deberían sumar prácticamente todos los puntos que restan -27- para estar en Primera el próximo año.

Menos complicado, aunque muy ligeramente, lo tiene el Alavés, que caía ante el líder. El triunfo de Las Palmas y el empate del Murcia reducen las referencias a las que aferrarse y la salvación se sitúa ya a siete puntos. Diez en el caso del Eibar, con pie y medio en Segunda B tras caer ante un rival directo. Como la Real, los armeros deberían ganarlo prácticamente todo para conseguir su objetivo.