En la historia reciente de la televisión hay varios casos de series de culto que han tenido varias vidas, muchas de ellas fuera de los conductos habituales, y acabamos de tener constancia de que la serie «Perdidos», es uno de esos fenómenos que cuesta entender y mucha más explicar con razonamientos de mercado. Pocas veces se queda guardado en la memoria un estreno como el de esta serie, una tarde de domingo en la primera estatal. El desconcierto fue mayúsculo. Se adelantó su estrenó, la promoción fue muy mala, y confieso que en su primera entrega no me sentí concernido. Es más, recuerdo que me pareció algo muy visitado en el cine americano e intrascendente. El segundo capítulo me dejó todavía más fuera de sitio, aunque las claves empezaron a hacerse más notables, había algo extraño, una atracción fatal, un misterio que le dotaba de algo especial, pero no lo suficiente como para mantenerse mucho tiempo en la parrilla competitiva.

Pasó a La 2, encontró una clientela fiel, fanática, seguidora incondicional, pero no alcanzaba los datos de audiencia necesarios para mantenerse en la parrilla, y mientras iba sufriendo pequeños fracasos de audiencias, crecía de manera universal los seguidores, se hacían tesis, hipótesis sobre quienes eran unos y otros, los actores adquirían fama, crecía su leyenda, aumentaban los círculos dedicados a su análisis y difusión. Las descargas de los capítulos anteriores, su venta en soporte dvd, toda una marea de estrictos conocedores de los pormenores de situaciones y personajes.

Y de repente aparece en Cuatro, colocan la tarde del domingo los seis primeros capítulos que logran una media de audiencia más que esperanzadora. La estrategia de la cadena es mostrar todos los capítulos emitidos hasta llegar a la última temporada, con lo que pone a prueba una fórmula que le puede reportar una clientela fiel. Los más especializados seguidores ya conocen los últimos capítulos porque el mundo está muy bien comunicado y además de mascarillas, hay intercambios de archivos, novedades, descargas y otras posibilidades. Vamos a seguir con interés esta inmersión en una serie que lleva camino de convertirse en mítica.