Los países de la UE «inflan» su cada vez más pírrica ayuda a los países empobrecidos
GARA |
La Confederación de Organizaciones No Gubernamentales (ONG) europeas, Concord, denuncia que, en plena crisis global, los gobiernos de la UE están «dando la espalda» a los países pobres y siguen «inflando» sus cifras de ayuda al desarrollo para simular que cumplen sus promesas.
Unos días antes de que se celebre el Consejo de ministros de Ayuda al Desarrollo de la Unión Europea (UE) en Bruselas, Concord ha presentado el informe «Lighten the load, in a time of crisis European aid has never been more important» (Aligerad la carga, en tiempos de crisis la ayuda europea es más importante que nunca).
El estudio revela que las cifras oficiales presentadas por la UE -que asegura que destina un 0,40% de su Renta Nacional Bruta (RNB) a ayuda al desarrollo- «disimulan cantidades importantes de ayudas infladas».
En realidad, según el autor de este informe y miembro de Concord, Javier Pereira, las aportaciones reales europeas sólo representan un 0,34% del RNB colectivo, «muy lejos» del 0,56%, objetivo previsto para 2010.
Deudas, becas y refugiados
Esto se debe a que los gobiernos de la UE siguen contabilizando como en años anteriores la condonación de las deudas, las becas a estudiantes extranjeros y las ayudas a refugiados como ayudas al desarrollo.
«En estos casos no existe una transferencia real de los recursos y el dinero se queda en los países ricos», explicó Pereira, para añadir que, por tanto, esas medidas, «aunque las agradecemos», no se pueden enmarcar dentro de las ayudas al desarrollo de los países pobres.
Excepto Luxemburgo, el resto de países europeos ha hinchado sus ayudas, siendo Austria con diferencia la que registra un mayor porcentaje, un 52%, de «ayuda inflada», seguida de Eslovaquia (33%), Alemania (26%), Estado español (23%) e Italia (21%). El Estado francés infló en un 6,38% su ayuda.
Sólo Finlandia y Holanda
Tan sólo Finlandia y Países Bajos figuran como países que sí alcanzarán sus compromisos sobre ayuda al desarrollo, mientras que diez estados miembros -entre los que se encuentran Alemania, Estado francés o Italia- no lo harán, según el estudio.
Concord, que agrupa a 1.600 ONG europeas, insta a los gobiernos europeos a ser coherentes recordó que las medidas que llevan a cabo para ayudar a los países pobres han de responder únicamente a «una cuestión de justicia y de solidaridad».
«No tiene sentido dar ayuda con una mano mientras que con la otra firman acuerdos comerciales o agrícolas injustos con los países pobres», concluye.