Colocan sendos monolitos en Durango e Irurita en memoria de las víctimas del franquismo
Decenas de personas participaron ayer en Durango en el acto organizado por EHGAM en memoria de las personas que fueron perseguidas y represaliadas bajo el régimen franquista por su «opción sexual». Mientras, en Irurita, se homenajeó a los esclavos del franquismo.
GARA |
Aunque de distinto signo, los dos actos que se llevaron a cabo ayer por la mañana en Durango y en la localidad navarra de Irurita contaron con un denominador común: honrar la memoria de las víctimas del franquismo. Mientras que en Landako de Durango se recordó, de la mano de EHGAM, la memoria de las «otras» víctimas, es decir, de los gays y lesbianas que fueron fusilados o represaliados por su condición sexual, en Irurita se recordó a los esclavos del franquismo que construyeron a punta de fusil los 15 kilómetros de carretera que distan entre Irurita y Artesiaga.
A las 12.30 comenzó en la zona Landako de Durango el acto organizado por el colectivo EHGAM en memoria de las personas que fueron «perseguidas y represaliadas por el régimen franquista debido a su opción sexual y afectiva y que lucharon bajo ese régimen por vivirla en libertad». Allí, colocaron una escultura realizada por Koldobika Jauregi, y el acto contó con la participación y la presencia de, entre otros, el bertsolari Jon Maia, la locutora Udane Goikoetxea, así como de representantes institucionales y de la asociación Ahaztuak.
15 kilómetros «a punta de fusil»
Casi a la misma hora, pero en Nafarroa, en concreto en Irurita, se colocó otra escultura en memoria de los esclavos del franquismo que fueron forzados a construir la carretera entre Irurita y Artesiaga. Quince kilómetros construidos a punta de fusil de los franquistas.
Este tramo fue abierto entre 1939 y 1941 por 1.756 prisioneros de los Batallones de Trabajadores 18 y 159, y del Batallón Disciplinario de Soldados Trabajadores 12. Además, en el valle de Baztan, otros 3.463 prisioneros construyeron fortificaciones de montaña. Según recordaron ayer, aunque seguramente fueron más, hay constancia documental de la muerte de dos prisioneros durante la construcción de esta carretera: Manuel Castaño Martínez, de Almería, y Ciriaco Díaz Pastor, de Guadalajara.
Ayer se recordó su memoria en un sencillo acto celebrado en Irurita, donde, además, se colocó un monolito y un panel explicativo sobre cómo y quienes construyeron ese tramo de carretera «a punta de fusil» de las tropas franquistas.
El acto de Durango, que fue organizado por el colectivo EHGAM, homenajeó a los «perseguidos y represaliados por el régimen franquista por su opción sexual», y contó con la presencia de cargos políticos.
El acto en memoria de los esclavos del franquismo fue organizado por el Ayuntamiento de Baztan, Iruritako Herria, Instituto Gerónimo de Uztariz y por la asociación Memoriaren Bideak.