ELECCIONES AL PARLAMENTO EUROPEO
Los votos a EHA servirán para «plasmar en Europa la existencia de Euskal Herria»
Ante un público muy motivado, EHA celebró su mitin central ayer en Ezpeleta. La necesidad de «mostrar que Euskal Herria existe, también en Europa» y de «apostar por un modelo anticapitalista» fueron los ejes del discurso.
Arantxa MANTEROLA | EZPELETA
«Para construir el futuro de Euskal Herria día a día, también en Europa, necesitamos todos nuestros votos», clamó Ixabel Etxeberria, cabeza de lista de Euskal Herriaren Alde (EHA) en el mitin celebrado ayer en Ezpeleta, cuando apeló a los más de cuatrocientas participantes a redoblar esfuerzos para recabar el máximo voto abertzale, «votos que serán contados y observados por París uno por uno».
Etxeberria incidió en que EHA está desarrollando una campaña «sin polémicas, porque tenemos muy claro que nuestro principal adversario es la derecha», dijo en referencia a UMP, cuyo tercer candidato, el actual europarlamentario vasco Alain Lamassoure, «no debe -según la candidata- resultar elegido».
Recordó que EHA «no quiere la actual Europa de los bancos, de los capitalistas, de la OTAN y de las infraestructuras gigantescas». Para Etxeberria, «Euskal Herria necesita y merece otro modelo de Europa, basado en la solidaridad, para hacer frente a su futuro».
Para cuando intervino, el ambiente del frontón cubierto estaba bien caldeado por los anteriores oradores. El primero de ellos, el ex-parlamentario abertzale Koldo Gorostiaga explicó, refiriéndose a «la actual apuesta por la autonomía», que existen dos formas de entender ese marco político: «A la baja, como la del Estado español, o, a la alta, para garantizar la supervivencia de los pueblos. Ése es nuestro caso». Gorostiaga recalcó que «hace tiempo que tenemos hechos los deberes de la autoafirmación y la autodefinición como pueblo» y alertó de que «sería un grave error no considerar a los siete herrialdes como un único pueblo también en la Unión Europea», máxime cuando ésta «se empeña en negar la evidencia de su existencia».
El eje de la intervención de Tasio Erkizia fue, asimismo, la existencia de Euskal Herria. Manifestó que aunque no fuera posible presentar una lista única, tenían «gran ilusión» en hacerlo cuando menos con la misma denominación, precisamente para «aparecer ante Europa y ante los estados francés y español como un solo y único pueblo».
«Estrategia nacional»
Para Erkizia, «es hora ya de superar las mugas culturales y subjetivas que a menudo hasta los propios abertzales tienen en mente y poner en marcha una estrategia nacional concertada» para construir «el Estado vasco». El militante abertzale agradeció sin mesura la «dignidad y solidaridad» demostradas por II-SP, y añadió que «ahora hay que ganar el partido de llevar a Sastre a Europa». Deseo al que se unieron los asistentes con una lluvia de aplausos.
Gabi Mouesca, una de las más de novecientas personas que ya han expresado su apoyo a EHA, se declaró «solidario de las miles de ciudadanos que no podrán ejercer el derecho de voto, entre ellos muchos presos», precisamente porque él mismo lo tiene vetado. Calificó el derecho de sufragio como «uno de los que reconoce la capacidad de decisión y devuelve la dignidad» a las personas.
Otro de los argumentos que han decidido a Mouesca a manifestar públicamente su apoyo a EHA es que le «gusta la sana radicalidad de la lista» y su mensaje «límpido y transparente porque dice claramente `zazpiak bat' y se declara, sin tapujos, anticapitalista».
La intervención de la representante de Askatasuna Anaiz Funosas fue, sin duda, la más interrumpida por los aplausos del público. Comenzó diciendo que «aquí faltan muchos amigos», refiriéndose a «quienes han tenido que huir para evitar la represión y la tortura y a los 746 militantes presos».
Denunció con contundencia que la actual Europa «protege la tortura», establece herramientas para hacerla posible «como la euroorden»; «es un sistema que vulnera «derechos y libertades porque teme la voz de los ciudadanos» y «niega hasta la propia existencia de Euskal Herria». Destacó el «compromiso y la lucha de todos los represaliados» a quienes puso como «ejemplo de fortaleza, voluntad y dignidad».
La inquietud por la desaparición del militante y la exigencia de respuestas sobre lo que le ha sucedido, fue constante. Asimismo, el apoyo a los colectivos de refugiados y presos se plasmó con aplausos y lemas, en especial, cuando varias personas subieron al escenario con pancartas de los logotipos de ambos colectivos.