El médico abortista George Tiller fue víctima el domingo de un atentado nada más llegar a la iglesia luterana de la Reforma, en Wichita (Kansas), para asistir a misa, según informaron los medios locales.

Tiller, de 67 años, se hizo famoso por regentar una clínica ginecológica en Wichita y durante años fue víctima de los ataques de los grupos antiabortistas por realizar interrupciones del embarazo después de las 22 semanas de gestación. .

La Policía detuvo el mismo domingo a Scott Roeder, de 51 años, que fue encarcelado en una prisión de Wichita como principal sospechoso de la muerte de Tiller.

Aunque Roeder es conocido por sus vínculos con los grupos antiabortistas, la fiscal del Estado de Kansas, Nola Foulston, señaló que las autoridades pensaban que actuó solo.

Tiller padeció en 1991 el acoso de su clínica por el grupo antiabortista Operación Rescate y un activista le disparó en 1993.

La Federación estadounidense de Planificación Familiar, por su parte, destacó que Tiller era «el ejemplo de un médico que practicaba una atención de alta calidad con gran compasión».