Los despedidos de Logex se encadenan al Departamento de Trabajo en Iruñea
La plantilla de la subcontrata de Volkswagen vuelve a movilizarse después de que las promesas de reincorporación, por las cuales finalizaron la huelga de hambre, no se hayan materializado.GARA|
Cuatro de los 16 despedidos de Logex se encadenaron ayer a mediodía a las puertas del Departamento de Trabajo del Gobierno de Nafarroa. El último acto de protesta de su cadena de movilizaciones de la antigua plantilla de esta subcontrata de Volkswagen se desarrolló desde las 11.00 hasta las 11.30, cuando agentes de la Policía Foral cortaron las cadenas y les obligaron a disolverse.
Los encadenados estuvieron arropados en todo momento por el resto de compañeros, que se encontraban concentrados junto a ellos con una pancarta. Todos fueron idetntificados y los agentes les informaron de que se les abrirían diligencias por desórdenes públicos.
Los despedidos, por su parte, culpan de esta acción a las empresas Volkswagen, FCC Logística, Saint Gorbain, FM Logex, pero también al Departamento de Trabajo de Nafarroa, al propio Gobierno y a los partidos políticos. Asimismo, aseguran que les harán responsables de todas las demás acciones que van a realizar en defensa de sus puestos. En el comunicado, los despedidos afirman que continuarán luchando mientras estas empresas e instituciones «sigan haciendo dejación de sus responsabilidades y compromisos».
La plantilla de Logex fue despedida después de que Volkswagen decidiera que sólo iba a contratar a dos empresas logísticas, entre ellas FCC, que empezó a realizar el trabajo de Logex (el suministro de lunas para el actual modelo de Polo, el A04) reventando la huelga que mantenían los 16 trabajadores y que sólo finalizó cuando el día 22 de este mes se hicieron efectivos los despidos.
Los ex empleados afirman que el trabajo que realizaban no ha desaparecido y, por tanto, piden continuar llevándolo a cabo. Una reivindicación con «fácil arreglo» según les han asegurado los distintos actores sociales con los que se reunieron tras una huelga de hambre de nueve días. Sin embargo, nadie les ha propuesto todavía ninguna solución práctica.