Hoy toca reflexionar. Y de golpe, a la altura de la mirada, me encuentro con un recorte de una vieja entrevista en «El Correo» a Pablo Gorostiaga, entonces alcalde de Laudio. «Garzón es un `alicate'», dice el titular. «Pero no le odio. Yo no odio a nadie. No es bueno a ningún nivel», añade. Pablo Gorostiaga está hoy en la cárcel, condenado a 7 años y 8 meses de prisión por ser miembro del Consejo de Administración de Orain. Le imputó con malas artes el «alicate». He ahí un punto para la reflexión. Como pensar en sus compañeros José Luis Elkoro y los hermanos Murga, también encarcelados. Y en Xabier Salutregi, enjaulado por 7 años y 6 meses acusado del delito de dirigir un periódico libre con el agravante de su compromiso con el país. Y Teresa Toda, 6 años.

También llama a la reflexión que prácticamente toda la dirección de Batasuna esté encarcelada desde hace ya casi dos años, sin ni siquiera haber sido juzgados. Sería largo dar todos sus nombres, pero por cercanía no puedo dejar de mencionar a nuestra compañera Maite Díaz de Heredia. Y reflexiono pensando en su hijo, que tiene también a su padre, Txema -peligroso abogado-, enjaulado lejos de casa. Aquí me asalta el recuerdo de la preciosa columna que Salutregi le dedicó a Ane Muguruza cuando balas controladas nos arrebataron a su padre, Josu. Ane estuvo ayer haciendo su reflexión sobre todo esto acompañada del abrazo solidario de Iniciativa Internacionalista, el mismo que el 29 de setiembre de 1985 Doris Benegas acercó al parque Monterron de Arrasate para homenajear a Pakito Arriaran. Al joven vasco muerto en combate en El Salvador y a su padre les dedicó un emocionado escrito Alfonso Sastre. Hoy -¡carajo!- el FMLN preside aquel cercano país. Demostración de que la reflexión acompañada de hechos puede llevar a un punto de inflexión.

Ese punto es posible también en Euskal Herria. Los resultados de mañana pueden dar un buen empujón. Reflexión, acción, empujón e inflexión. (Y los «alicates» al pilón)