El Partido Popular anda pensando en presentar una moción de censura contra José Luis Rodríguez Zapatero porque considera que los datos de las elecciones europeas demuestran que ha perdido el apoyo mayoritario de la ciudadanía, y uno de los elementos de análisis que maneja es que trasladando los resultados del domingo al Congreso de los Diputados, ellos obtendrían 169 diputados, mientras que el PSOE se quedaría con 150.

Evidentemente, las simulaciones de resultados son un ejercicio meramente teórico sin ningún tipo de soporte científico ni de repercusión práctica, pero contribuyen a visualizar de otra manera unos resultados como los del pasado domingo.

Y por no salirnos de las repercusiónes en el Congreso de los Diputados, se observa que se- rían varios los cambios que se producirían en su composición. Desde el punto de vista vasco se comprueba, por ejemplo, que el PSOE perdería un diputado por Bizkaia y otro por Gipuzkoa.

El dolor por esta pérdida sería doble en buena parte del partido y sobre todo en las estructuras gubernamentales y del ministerio que dirige Alfredo Pérez Rubalcaba, porque los dos escaños que se le restan al PSOE se los llevaría Iniciativa Internacionalista-La Solidaridad de los Pueblos, a la que desde Interior y Justicia han perseguido sin poder finalmente impedir su participación electoral.

Quien también perdería su escaño en Madrid sería la representante de Nafarroa Bai Uxue Barkos, merced a los pésimos resultados que el domingo obtuvieron los partidos coaligados. Ese diputado iría a parar al PP, aunque a poco que II-SP mejorara sus resultados en Nafarroa podría aspirar también a hacerse con él. Aunque, recordemos, esto es una simulación y en la realidad habría que contar no sólo con que el electorado no se comporta igual dependiendo del tipo de comicios, sino también habría que ver cómo se salda el actual divorcio entre UPN y PP y qué tipo de alianzas podrían hacerse en el futuro.

Por lo demás, el PNV se quedaría con los mismos 6 diputados con los que cuenta en la actualidad. Los jeltzales sí verían mejorar su posición en el Senado, puesto que la victoria electoral del domingo en Bizkaia les permitiría sumar dos senadores más que los que tiene en la actualidad.

El PSE ganaría en Gasteiz

Puestos a hacer traslaciones de resultados, la ganancia de senadores no sería consuelo para el PNV al comprobar que, con las cifras del domingo, perdería la mayoría de escaños en el Parlamento de Gasteiz, donde la primera fuerza sería el PSE.

El PNV obtuvo el domingo 207.040 votos, mientras que el PSE se quedó por detrás con 200.249. Sin embargo, el PSE tendría 24 escaños y el PNV bajaría a 21. Son las paradojas del sistema electoral autonómico, que reparte el mismo número de escaños a cada circunscripción provincial. La clave, en este caso, estaría en Araba, donde el PNV ha quedado muy detrás del PSE, que le sacaría 4 parlamentarios de ventaja. Como en Gipuzkoa estarían empatados, la ventaja mínima de 1 escaño en Bizkaia a favor de los jeltzales no compensa los malos resultados alaveses.

Aunque esto no es más que una hipótesis, el PNV debería tener en cuenta este tipo de proyecciones teóricas, puesto que van dando la imagen de un partido que pierde fuelle electoral y, sobre todo, solidez militante. Por contra, el PSE ha sabido mantenerse en la cresta de la ola en la que está desde que Patxi López accedió a Ajuria Enea. La euforia que esto parece haber creado entre su base electoral no se ha visto todavía contrarrestada por el desgaste que puede suponer la gestión de gobierno en tiempos de crisis.

La sorpresa en el Parlamento de Gasteiz la daría Iniciativa Internacionalista, que se haría con 12 escaños. A la plataforma apoyada por la izquierda abertzale le pasa con el PP lo mismo que al PNV con el PSE. II-SP quedó el domingo prácticamente empatada a votos con la formación de Antonio Basagoiti, y es más que probable que cuando se resuelvan las anomalías detectadas en varios pueblos pase a ocupar la tercera posición superándole. Sin embargo, este partido seguiría teniendo 14 escaños, dos más que la izquierda abertzale a pesar de tener algunos cientos de votos menos.

En cualquier caso, y al margen de simulaciones de escaños, convendría tener en cuenta el golpe sicológico que puede suponer que finalmente II-SP acabe superando en voto al PP en el conjunto de la Comunidad Autónoma Vasca. Para ello habrá que esperar a ver cómo se resuelven los recursos que la formación internacionalista interponga ante las irregularidades que se han ido detectando en varias localidades, donde los votos obtenidos por II-SP han sido adjudicados a otras listas.

La coalición Independentista eta Ezkertiarrak, formada por Aralar y EA, se quedaría con 4 parlamentarios, uno menos de los que suman ahora. Su representación sería, por tanto, la tercera parte de la de II-SP, un dato a tener en cuenta por quienes a raíz de las últimas elecciones autonómicas hablaban de cambios en la correlación de fuerzas en el ámbito sociológico abertzale y de izquierda.

Otro Parlamento Foral

El comentario anterior es también válido para la traslación de los resultados de estas elecciones europeas del domingo al Parlamento Foral de Nafarroa. Sumando los votos conseguidos por Aralar-EA y el PNV, se obtiene el dato de que NaBai bajaría de los actuales 12 parlamentarios a 5, mientras que la izquierda abertzale ilegalizada y proscrita en las dos últimas citas electorales (nada menos que ocho años) regresaría a la Cámara con 6 escaños.

La derecha, representada en 2007 por UPN y ahora por el PP, seguiría siendo la fuerza mayoritaria, aunque perdería un escaño. El gran beneficiario de la traslación de votos de las europeas a las forales sería el PSN, que subiría de los 12 representantes actuales a unos hipotéticos 17. IUN perdería uno de los dos escaños que tiene en la actualidad y CDN, como no ha concurrido a estos comicios, se quedaría sin representación.

Claro está que, como se ha señalado en la parte referida al Congreso de los Diputados, los resultados futuros en Nafarroa están en función de cómo se resuelva la separación entre UPN y PP y en qué condiciones llegan a cada una de las futuras citas electorales.

La traslación de los resultados de las elecciones europeas a las juntas generales de los diferentes territorios también produciría notables cambios, pero el sistema de elección en base a circunscripciones dentro de cada herrialde cuyos datos no pueden obtenerse oficialmente en estos comicios hace imposible su concreción. Pese a todo, es fácil adivinar que, por ejemplo, la actual Diputación de Gipuzkoa, formada por PNV y la escisión de EA, no tendría ninguna solidez.

En lo referido a los ayuntamientos, en el cuadro inferior se puede encontrar cómo quedarían los de las capitales y las variaciones que se producirían, sobre todo por la irrupción de Iniciativa Internacionalista.