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«Si no fuera por mi familia, hubiese dejado el remonte, porque estaba hecho polvo»

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Iñaki Lizaso

Remontista

El zaguero de Doneztebe sufrió una grave lesión en su hombro derecho -rotura de ligamentos- que le obligó a una operación quirúrgica en octubre del año pasado. Ahora, tras ocho meses en el dique seco y a sus 36 años, ha vuelto a las canchas donde ha cosechado sus mayores logros. Lizaso pensó seriamente en dejar el remonte, pero gracias a su familia ha podido disfrutar de nuevo de este deporte.

Imanol CARRILLO |

El zaguero de referencia de la última década reapareció el pasado 6 de junio en Galarreta. El remontista se muestra con buenas sensaciones, aunque todavía reconoce estar a falta de ritmo.

¿Qué tal se encontró en su reaparición?

Empecé con mucha ilusión, nerviosismo y preocupación, porque ha sido una lesión muy dura, muy larga. Las sensaciones han sido positivas, pero todavía no estoy salvado. Solamente llevo dos partidos y me va a costar coger ritmo, seguridad en el brazo... Tendré que pasar dos o tres meses jugando al más alto nivel para ver si realmente responde el hombro. Lo importante son las sensaciones y rayar a un nivel aceptable.

¿Cómo recuerda el momento de la lesión?

Lo recuerdo muy mal. Tampoco sabía realmente que tenía roto el tendón. Fui donde el médico Eduardo Escobar pensando que tendría algo, pero no tanto. Cuando el médico me dio la mala noticia, para mi familia y para mí fue un palo bastante fuerte, porque es una operación grave para un remontista, con los riesgos que tenía ya que no había suficientes garantías al 100% de volver a jugar. Lo de operar fue una decisión drástica, pero hubo que tomarla y había que seguir para adelante.

¿Cómo han sido estos ocho meses fuera de las canchas?

Ha habido de todo. La operación salió fenomenal. Los dos médicos que me operaron son unos artistas en este tipo de lesión. A los dos meses empecé a entrenar, cosa que fue un error, ya que se me inflamó otra vez el tendón.

Por eso ha habido de todo. De tener mucha ilusión para volver enseguida, a tener que estar otros dos meses sin poder mover el brazo. Muchas veces he pensado también en dejar el remonte, con la moral por los suelos. Estuve más de tres meses sin ir al frontón, porque no tenía ni ganas de ver partidos.

Al lado suyo habrán estado la familia, los amigos...

La familia sobre todo. Mi mujer ha estado ahí al pie del cañón. Y cuando iba a Elizondo, a Pamplona o a Donostia muchísima gente me preguntaba cuándo volvería. Te parece que el remonte es un deporte minoritario, que no lo sigue la gente, pero me he dado cuenta de que hay más gente de lo que pensamos. Eso, quieras o no, te da moral e ilusión para seguir.

Si tuviese que nombrar a alguien en esos malos momentos...

A mi mujer y a mi hija que me han estado aguantando, porque he estado casi dos meses con el brazo en cabestrillo sin poderlo mover nada, mi mujer haciéndome todo y mis familiares aguantándome. La verdad es que les estoy muy agradecido. Si no hubiese sido por ellos, hubiese dejado el remonte, porque estaba hecho polvo, moralmente muy mal.

En su reaparición, ¿tuvo miedo de sentir algún tipo de dolor?

La verdad es que en el brazo jugando no he sentido nada. De abajo y de costado le suelto tranquilamente, sin ningún temor, pero cuando viene de arriba siempre te viene a la cabeza ese miedo a que te pueda partir. Creo que eso con el tiempo irá desapareciendo.

¿Qué pensaba mientras jugaba?

Cuando juegas no te da tiempo a pensar en eso, pero después en la ducha sí. Después de ocho meses te vienen todos los recuerdos, de los dolores del hombro y de que si voy a dejar el remonte o no. Y es que son 17 años de profesional; es media vida. Quieras o no, formo parte de Galarreta y del Euskal. Son sentimientos fuertes.

Y ahora, ¿cuál es su próximo objetivo?

Mi objetivo prioritario en estos momentos es la salud y el hombro. Después ya no me marco el ganar txapelas o el ser el número uno como lo hacía antes. Lo que quiero, a mis 36 años, es disfrutar del remonte. Busco otros objetivos, siempre dedicándome exclusivamente al remonte, porque yo me dedico exclusivamente al remonte, y entrenando como siempre, y siendo en la cancha lo que siempre me ha caracterizado, que es dar siempre el 100%.

En verano, estará deseando disputar numerosos partidos.

Kike Elizalde ya me dijo que, si seguía así, contaba conmigo para el Torneo de San Fermín. Después viene el Individual en agosto, pero no sé cómo me encontraré. En un Individual estás solo en la cancha, te exige mucho más que en parejas. Según cómo me encuentre en agosto, decidiré si juego o no. La verdad es que me haría mucha ilusión volver a jugar un Individual, y hacer un Individual importante.

 
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