Micheletti responde con el toque de queda a las protestas populares
Mientras miles de hondureños salían ayer a las calles para exigir el retorno del presidente Manuel Zelaya, el Gobierno golpista volvió a instaurar el toque de queda en este país centroamericano. Durante las movilizaciones de ayer se bloquearon todos los accesos a Tegucigalpa. El presidente golpista, Roberto Micheletti, anunció que está dispuesto a dimitir, aunque puso como condición que Zelaya no regrese a Honduras.GARA |
El Gobierno golpista de Honduras decretó ayer nuevamente un toque de queda desde la medianoche hasta las cinco de la maña de ayer [13.00 en Euskal Herria] para hacer frente a las protestas convocadas por simpatizantes del depuesto presidente Manuel Zelaya.
La decisión, anunciada en un mensaje difundido por radio y televisión, restablece la prohibición del tránsito de personas y vehículos en las noches, que estuvo vigente desde el 28 de junio, cuando Zelaya fue derrocado, hasta el 12 de julio.
La medida, según el Gobierno golpista, «se adoptó en vista de las continuas y abiertas amenazas por parte de grupos que buscan provocar disturbios y desorden en algunos lugares del país y para brindar seguridad y protección a todas las personas y bienes».
«Solicitamos la comprensión de la población y hacemos un llamado a acatar esta disposición adoptada con el afán de proteger la seguridad de las personas y de sus bienes y garantizar el orden y la paz social», destacaron los golpistas.
La declaración se conoció después de que organizaciones sociales hondureñas llamasen a ocupar entre ayer y hoy puntos estratégicos del país y a mantener las protestas en las calles para exigir el retorno de Zelaya.
La presión de estos grupos pareció hacer mella en el presidente golpista, Roberto Micheletti, quien barajó la posibilidad de dimitir siempre que Zelaya se comprometa a no regresar a Honduras.
«Estoy dispuesto a hacerlo», declaró Micheletti ante preguntas de la prensa sobre su posible renuncia, aunque la condicionó a un «sin retorno» de Zelaya.
Sin entrar en detalles, reveló que a representantes del Gobierno golpista «les hicieron esa propuesta en una ciudad importante de EEUU».
«Esa propuesta era clara y definida, y yo, para solventar esta situación que se pudiera presentar, estoy en la mejor disposición», sostuvo.
Bloqueo a Tegucigalpa
Durante la jornada de protesta de ayer, los partidarios de Zelaya colocaron barricadas en los principales accesos a Tegucigalpa. Cientos de vehículos permanecían bloqueados en la carretera hacia San Pedro Sula, la capital económica del país. Juan Barahona, dirigente del Bloque Popular, explicó que también se bloquearon otros tres accesos a la capital.
Los profesores del Sindicato de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (Sintrauhnah) bloquearon los accesos al principal centro educativo del país centroamericano.
Por otra parte, el primer Congreso de Movimientos Sociales de Izquierda de Centroamérica, Sudamérica y el Caribe que comenzó ayer en Managua analizó, entre otros asuntos, la creación de un instrumento de solidaridad con los sindicalistas hondureños. «Los gorilas han salido del zoológico y nosotros estamos alerta», señalaron.
La canciller hondureña, Patricia Rodas, señaló ayer en La Paz que mañana se tomarán «medidas más agudas si la camarilla golpista no entrega el Gobierno al presidente constitucional Manuel Zelaya»
El presidente de Bolivia, Evo Morales, se mostró ayer convencido de que el golpe de Estado en Honduras fracasará, ratificó su apoyo a Manuel Zelaya y atacó a EEUU, a quien responsabilizó de la crisis hondureña.
Morales pronunció un discurso en la plaza Villarroel de La Paz en el primer acto central para conmemorar los 200 años de la revolución de los ciudadanos paceños contra las autoridades coloniales españolas.
Al acto oficial asistieron los presidentes de Venezuela, Paraguay y Ecuador y la canciller hondureña Patricia Rodas. GARA