Sus seis años en la Asobal son una garantía para un remodelado San Antonio, que deberá combinar experiencia y juventud en un nuevo ciclo de la escuadra antoniana con unos objetivos menos ambiciosos de los acostumbrados, pero no por ello con menos ilusión por obtener éxitos.

No resultará sencillo desdeñar una oferta del campeón de Europa y venirse a Iruñea.

Desde diciembre, cuando tuvimos el primer contacto, ya sabía que quería venir aquí. Hace meses que mentalmente me sentía jugador del San Antonio y tenían que pasar muchísimas cosas como para que no fichara por este equipo. El entrenador y el presidente siempre me habían mostrado su interés por que formara parte de este proyecto y eso me gusta. Me he sentido muy querido y eso no se paga con dinero.

¿Qué espera poder aportar?

Creo que un buen lanzamiento exterior y una buena defensa, para evitar hacer muchos cambios. Además, me gusta jugar con los extremos. Me espera un duro trabajo de pretemporada porque lo primero que quiero es acoplarme dentro y fuera de la cancha a mi nuevo equipo.

Será más fácil teniendo en cuenta que ya lleva seis años militando en la Asobal.

Es una ventaja, sin duda. Conozco la competición y los diversos sistemas de juego que se utilizan en el balonmano español. Junto a ello, estoy integrado, me siento como en mi propia casa y las costumbres no me resultan extrañas, eso siempre ayuda a un jugador.

Una experiencia que le puede venir muy bien a un conjunto plagado de nuevos valores.

No voy a eludir esa responsabilidad, pero tampoco voy a ser el único que la asuma. Hay otros muchos jugadores con mayor veteranía que yo, como es el caso de Fernando Hernández, Ion Belaustegi, Víctor Álvarez o Carlos Ruesga, por mencionar a algunos. No creo que vayamos a ser un equipo de novatos, precisamente, sino que vamos a pelear por lo más alto y cada uno va a dar lo máximo.

Parece, pues, que los objetivos del equipo van a seguir siendo muy elevados.

Vamos a jugar la Recopa y queremos ganarla, porque somos capaces de hacerlo, aunque también conscientes de que va a ser difícil, nadie nos va a regalar nada. Ese es uno de los retos y el otro, estar entre los tres primeros o lo más alto posible en Liga. La temporada pasada fue bastante dura para el San Antonio y este año es muy importante, pero confío en que todo saldrá bien y cumpliremos con lo que se nos exija.

¿No es un hándicap tanto cambio habido en el equipo?

Es verdad que llegamos nueve jugdores nuevos, pero nos conocemos de anteriores equipos y selecciones, no habrá problemas para entendernos. No es una situación muy común, pero por eso va a ser una campaña muy interesante.

¿Son inalcanzables el Ciudad Real y el Barça?

El Barça es quien más se ha reforzado porque el Ciudad Real tiene problemas, como el resto de equipos. De todos modos, nuestra obligación es pensar en nosotros mismos.