ATENTADO DE ETA EN MALLORCA
Una bomba lapa mata a dos agentes en Mallorca en el segundo ataque contra la Guardia Civil en 34 horas
La explosión de una bomba lapa adosada a los bajos de un Nissan Patrol de la Guardia Civil causó la muerte a dos agentes de este cuerpo militar en el centro turístico de Mallorca. Horas después, un artefacto colocado en otro todoterreno era explosionado de forma controlada. Este atentado, registrado apenas 34 horas después del que tuvo lugar en Burgos, provocó el bloqueo temporal de la isla tanto por aire como por mar para intentar detener a sus autores.
GARA | DONOSTIA
Cuando todavía no se habían apagado los ecos del ataque contra la casa cuartel de Burgos -que se llevó a cabo a las cuatro de la madrugada del miércoles-, ayer la Guardia Civil fue objeto de otro atentado por parte de ETA. En esta ocasión, la explosión de una bomba lapa se cobró la vida de dos agentes del instituto militar en Mallorca.
Los hechos tuvieron lugar en el corazón turístico de la isla, en la localidad de Palmanova, ubicada en la costa del municipio de Calvià, cerca de la capital y a unos diez kilómetros del Palacio de Marivent, donde veranea la familia real española. Los medios de comunicación españoles destacaron que sólo restaban dos días para que, siguiendo su agenda oficial, Juan Carlos de Borbón llegase a Mallorca y que hace 13 días se puso en marcha el operativo de seguridad previo a su viaje. Además, el pasado día 24 José Luis Rodríguez Zapatero presidió un Consejo de Ministros especial en Palma.
El delegado del Gobierno español, Ramón Socías, explicó que, cuando los dos agentes fallecidos -Enrique Sáenz de Tejada García y Diego Salva Lezaun- se habían montado en el vehículo, la bomba lapa fue activada con un mando a distancia, y no con «un dispositivo de movimiento». Según su versión, los dos agentes habían cogido el Patrol minutos después de que lo dejara en ese lugar un brigada, con el fin de llevarlo a un garaje para una revisión de mantenimiento.
Por tanto, difundió la hipótesis de que, en ese momento, los autores se encontraban a «escasos metros» del cuartel de Palmanova vigilando los movimientos de los guardias civiles. También precisó que los dos vestían de paisano.
Todo esto sucedía entre las 13.30 y las 13.50. Horas después se localizaba una segunda bomba lapa en otro vehículo de la Guardia Civil. A las 19.40 los artificieros realizaron una explosión controlada en el coche patrulla que había permanecido aparcado en las inmediaciones de un segundo cuartel que el instituto armado ocupa en Palmanova, a unos 500 metros del primero, sin que se produjeran daños personales.
«Operación jaula»
Previamente se había puesto en marcha una amplia «operación jaula» con el objetivo de evitar que el autor o los autores de estas acciones armadas pudieran abandonar la isla. El aeropuerto de Son Sant Joan -uno de los de mayor tráfico de pasajeros de Europa- permaneció cerrado entre las cuatro y las seis de la tarde, si bien Socías remarcó que ordenó el cierre del aeropuerto a las tres en punto.
«El aeropuerto no efectúa ninguna operación por motivos de seguridad» siguiendo una orden del Ministerio de Interior, confirmó a la agencia francesa AFP un portavoz de AENA. «Los aviones que debían aterrizar aquí son desviados hacia otros aeropuertos a discreción de los pilotos», añadió. Cuando se cerró el tráfico aéreo, el aeropuerto madrileño de Barajas había operado la mitad de los 22 vuelos previstos para la jornada con destino a la isla, que recibe muchos más diariamente procedentes de otros puntos del centro y norte de Europa, así como de Gran Bretaña e Irlanda.
También fueron bloqueados por efectivos policiales los dos principales puertos de la isla, el de Palma y el de Alcudia, cancelando la salida de varios cruceros y retrasando las de los conexiones regulares con la península.
Según comentó el delegado del Gobierno español durante la rueda de prensa que ofreció tras la explosión del primer artefacto, las fuerzas de seguridad no descartaban que los autores del atentado tengan un piso franco en Mallorca, en el que podrían permanecer hasta que «se enfríe» el dispositivo de la «operación jaula». Socías confirmó que, salvo los dos agentes fallecidos, no había más víctimas, aunque dijo que el atentado podría haber causado «una masacre» teniendo en cuenta que el cuartel de Palmanova se encuentra muy cerca de una playa y, por tanto, por allí transitan muchos turistas.
Pasadas las diez de la noche, una grúa retiró el coche de la Guardia Civil en el que explotó la bomba que causó la muerte de los dos agentes, según informó Efe, bajo la curiosa mirada de decenas de turistas.
Rubalcaba: «Ha atinado»
El ministro de Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, y la de Defensa, Carme Chacón, fueron los representantes del Gobierno español que se desplazaron ayer hasta Mallorca, adonde hoy viajarán, entre otros, Felipe de Borbón, Rodríguez Zapatero y el líder del PP, Mariano Rajoy, para asistir a los funerales.
Tras visitar el lugar de los hechos, Rubalcaba indicó a la prensa que se había desplegado un «amplísimo dispositivo» de vigilancia. «Toda la vigilancia que podamos dar (...), la vamos a brindar», tanto a la familia real como al conjunto de los ciudadanos de la isla. En referencia al atentado de la víspera en Burgos, el ministro reiteró que «ETA falló y no consiguió su objetivo, que era matar», para añadir: «Hoy ha atinado y ha matado a dos jóvenes servidores públicos». En contra de lo que había anticipado el delegado del Gobierno, dijo que el Patrol en el que se produjo la explosión fue usado durante toda la mañana por los agentes fallecidos.
Los medios españoles destacaron que, según la agenda oficial, sólo restaban dos días para que la familia real comenzara su estancia estival en la isla.
ETA colocó dos coches-bomba en Mallorca -uno desactivado por los TEDAX- y atacó una residencia militar en 1991. Según sentencias de la Audiencia Nacional, Juan Carlos de Borbón estuvo en el punto de mira de militantes de ETA en 1995 y en 2004.
El atentado registrado en Mallorca tuvo un amplio eco internacional, tanto a través de los más importantes medios de comunicación -especialmente los anglosajones- como a través de las manifestaciones de condena y advertencia realizadas por gobiernos europeos e, incluso, el de Estados Unidos.
En sus ediciones digitales, la cadena BBC y los diarios británicos, «The Guardian», «The Independent», «Times» y «The Financial Times», así como el alemán «Spiegel», o el estadounidense «The New York Times», entre otros, colocaron durante muchas horas la noticia del atentado de ETA entre sus noticias principales, en ocasiones como la más importante, incluyendo imágenes gráficas y titulares llamativos, como los que afirmaban que se exendía «el pánico» en el Estado español tras la última cadena de acciones armadas.
También el Ministerio inglés de Exteriores actualizó su página web para hacer referencia a estos hechos, dirigiendo una advertencia a sus ciudadanos -tanto turistas como residentes en Illes Balears- ante el «alto riesgo de terrorismo en España». El Foreign Office indicaba que «los ataques pueden ser indiscriminados, incluso en lugares frecuentados por expatriados y visitantes extranjeros», añadiendo que «los recientes ataques atribuidos a ETA han tenido lugar en Palmanova, en la isla de Mallorca, y en Burgos y Bilbao», este último en referencia al del pasado 10 de julio contra la sede del PSOE en Durango.
El Gobierno británico asegura a sus ciudadanos que «las autoridades españolas son completamente conscientes del impacto del terrorismo y toman medidas para proteger a los visitantes», pero también recomienda «estar vigilantes».
La Casa Blanca, por su parte, prometió continuar su «estrecha colaboración» con Madrid en la «lucha contra el terrorismo». Según declaró a Efe el portavoz del Consejo Nacional de Seguridad de la Casa Blanca, Benjamin Chang, «Estados Unidos condena los recientes ataques terroristas en España y ofrece sus pensamientos y oraciones por las víctimas y sus familias».
El ministro alemán de Asuntos Exteriores, Frank-Walter Steinmeier, condenó «con la máxima dureza» el atentado y añadió que «Alemania está en estos difíciles momentos junto a España». El ministro socialdemócrata expresó su deseo de que los autores sean «arrestados y llevados ante la justicia».
GARA