El macabro hallazgo trascendió a última hora de la tarde de ayer y las labores de investigación pueden ser costosas, toda vez que se ha informado de que el cuerpo estaba en un avanzado estado de descomposición. Por el momento, el Departamento de Interior de Lakua ni siquiera ha detallado su sexo. En un primer momento, las agencias afirmaron de que resultaba imposible determinarlo debido a su deteriorado estado; luego matizaron que simplemente no se informaba de este extremo.

La Ertzaintza iniciaría hoy, con la luz del día, investigaciones en el entorno de la sima para tratar de obtener más datos sobre lo ocurrido. El hecho de que el cadáver estuviera envuelto en una lona sustenta la hipótesis de que pudo ser víctima de una muerte violenta.

Espeleólogos fueron quienes encontraron el cuerpo, que estaba escondido en el interior de una sima cercana al barrio de Madariaga, en la localidad guipuzcoana de Azkoitia, junto a la carretera que une este pueblo con Elgoibar. Se trata de una zona perteneciente al macizo calcáreo de Izarraitz, y en la que hay numerosas simas.

Avisada la Ertzaintza del hallazgo, desplazó a efectivos del grupo de montaña, que confirmaron la presencia del cuerpo y lo extrajeron para su análisis y, sobre todo, para intentar determinar su identidad y esclarecer lo ocurrido.

Según informó el Departamento de Interior del Gobierno de Gasteiz a Europa Press, en torno a las 16.00 un grupo de espeleólogos que se introdujo en una sima de Azkoitia informó de que había encontrado en el interior de la misma algo que podría ser un cadáver envuelto en una lona.

Zona acordonada

Desplazados al lugar efectivos del Cuerpo de Montaña, se introdujeron en la sima, de difícil acceso, y confirmaron en tornon a las 19.45 la presencia de un cadáver envuelto en la lona. La noticia se dio a conocer rápidamente.

Al caer la noche, la Policía autónoma tenía acordonada la zona y se anunciaba que hoy se procederá a tomar indicios en el lugar para identificar el cuerpo y determinar cómo y quiénes trasladaron el cadáver hasta allí, con la aparente intención de esconderlo.

Una vez el juez autorizara el levantamiento del cadáver, sería trasladado al Servicio de Patología Forense para practicarle la autopsia, que podría aportar algunos datos más sobre el tétrico hallazgo.