Un detenido en Donostia, en manos de la Audiencia Nacional
La Ertzaintza ha promovido una acusación de «enaltecimiento» contra uno de los dos detenidos en la tarde del sábado en Donostia, por lo que su caso queda en manos de la Audiencia Nacional. El otro quedó libre cerca de la medianoche del sábado, aunque se le ha abierto un procedimiento por «participar en una manifestación ilegal». El PP expresó su satisfacción por la actuación de la Ertzaintza.
GARA |
Uno de los dos detenidos en los incidentes producidos el sábado en Donostia, tras las cargas de la Ertzaintza contra quienes pretendían ejercer el derecho de manifestación, ha sido puesto a disposición de la Audiencia Nacional por la Ertzaintza acusado de «enaltecimiento del terrorismo», mientras que el otro quedó en libertad con cargos en la misma noche del sábado desde la comisaría del Antiguo.
Según informó en la mañana de ayer el Departamento de Interior de Lakua, este último salió a la calle pero deberá responder por la imputación de haber participado en una manifestación ilegal. Testigos afirmaron que el hombre fue detenido sólo por quedarse inmóvil ante la Ertzaintza mientras ésta cargaba en el Boulevard.
El otro arrestado está acusado de «enaltecimiento del terrorismo», por lo que ayer por la mañana continuaba en dependencias de la Policía autonómica en espera de ser puesto a disposición de la Audiencia Nacional. No se precisó si iba a ser trasladado a Madrid para ello.
Ambos arrestados, de 51 y 54 años, se encontraban en las calles en las que se desplegó la Ertzaintza para tratar de impedir que la izquierda abertzale expresara sus reivindicaciones. El Departamento de Interior que dirige Rodolfo Ares afirma que el imputado ante la Audiencia Nacional lanzó gritos en favor de ETA, por lo que fue detenido en la calle San Lorenzo, y asegura que el otro participó en un forcejeo con agentes de la Ertzaintza en el Boulevard.
La Ertzaintza se desplegó en estas y otras calles para impedir que se iniciara una manifestación con el lema «Salbuespen egoerari stop. Euskal Herriak du hitza eta erabakia», que había sido vetada primero por el Departamento de Interior de Lakua y después, muy poco antes de su inicio, por un auto judicial firmado por el magistrado de la Audiencia Nacional Baltasar Garzón. Pese a ello, miles de independentistas salieron a la calle con carteles y pegatinas, logrando agruparse puntualmen- te en varios grupos que la Ertzaintza disolvía a pelotazos.
Las escaramuzas se desarrollaron mientras se iniciaba oficialmente Aste Nagusia y se prolongaron durante unas dos horas, hasta que la Ertzaintza se marchó.
PP: «Terroristas»
Desde el PP, su dirigente Leopoldo Barreda calificó de «adecuada» la actuación de la Ertzaintza porque con ella «los terroristas no tomaron la calle».
Sin embargo, consideró que hay que «pedir responsabilidades» por los desperfectos materiales producidos por los enfrentamientos (en realidad, sólo se lanzaron algunas sillas de las terrazas).
Barreda añadió además que «merece replantearse que alguna responsabilidad habrá que buscar para quienes convocan y desconvocan y sin embargo luego se mantiene la convocatoria de hecho».
El otro arrestado quedó libre a medianoche del sábado. La Ertzaintza le acusa de «participar en manifestación ilegal», y asegura que forcejeó con los agentes. Testigos refieren que sólo se quedó quieto cuando éstos empezaron a cargar en el Boulevard.
Su portavoz, Leopoldo Barreda, saludó la intervención de la Ertzaintza, pero reclamó que «habrá que buscar algún tipo de responsabilidad para quienes convocan y desconvocan estas manifestaciones»