ALTUNA II 35

URRIZA 28

El mayor oficio de Altuna II le sirvió al delantero de Amezketa para lograr un importantísimo triunfo (35-28) ante la revelación, Javier Urriza, y clasificarse directamente para la liguilla de semifinales -sin tener que jugar el partido de cuartos- tras confirmarse definitivamente la baja de Koteto Ezkurra en la competición. De esta forma, Altuna II se enfrentará a Zeberio II y Urrutia en una liguilla que se disputará en Galarreta los próximos días 22, 27 y 29 de agosto.

El encuentro de octavos de final deparó un durísimo partido mano a mano, que solventó Altuna II a su favor gracias a los detalles del veterano: el saque -hizo 9 tantos directos, una bonita cifra-, el resto de saque -otros 5 tantos- y los poquitos regalos brindados al rival. Porque en el resto de facetas del juego, ya sea el ritmo, la pegada, la defensa o la competitividad, Urriza se mostró como un valor al alza para el mano mano, superior en muchos momentos a su rival. El delantero navarro tuvo serias opciones de triunfo y cuenta desde ya para ser un candidato a lo más alto en próximas ediciones.

«Hoy salgo muy contento del frontón, porque me he llevado un partido muy difícil. Sabía que iba a ser muy duro, Urriza es un remontista que regala muy poco, está siempre encima y llega a casi todo, y si le dejas pelota franca, domina muy fácilmente. Hasta el tanto 25 he sacado bien, le he dado buena dirección, pero después me ha costado bastante más. La verdad es que el final del partido no es fácil, hay que ir a sacar 35 veces, muchas veces después de correr hasta los primeros cuadros... esto es muy duro. He sabido sufrir, y he sabido aprovechar facetas del juego como el saque y el resto», señaló un Garikoitz Altuna que compensaba el cansancio acumulado con la ilusión por estar entre los mejores.

El inicio del choque no fue fácil para él. El ritmo marcado por un Urriza pegador y contundente desarbolaba la técnica de su rival y el navarro se adelantó en el marcador 1-6. Tras el empate a 11, el encuentro se convirtió en un toma y daca muy intenso, hasta que en el 20-19 el partido vivió un momento clave: un pelotazo a la chapa superior izquierda de Urriza, que era tanto, devolvió el saque a Altuna II, y el amezketarra enlazó un tacada fulminante hasta el 25-19, con un polémico saque que pudo ser falta incluído. El guipuzcoano estiró su racha hasta el 28-20, una brecha que dejó la eliminatoria vista para sentencia.

«Venía con la lección aprendida del partido contra Juaristi, en el que empecé mal, y he salido a jugar bastante agresivo, a sacar con violencia y buscar la pelota delante. He empezado bien, confiado, y he cogido una buena ventaja, pero he desaprovechado algunas pelotas francas y Altuna II ha neutralizado mi ventaja demasiado fácilmente, por errores propios. Después se ha asentado en la cancha, ha hecho las cosas bien y ha estado infalible, con un poco de suerte en algunos momentos. Se me ha ido una buena oportunidad, aunque al menos he visto que he progresado en técnica y en saber estar. Creo que puedo dar guerra en el mano a mano en años venideros», dijo Urriza, que se confirma como la esperanza del remonte en el futuro.