Según informó pasadas las 22.00 de ayer la página digital de «El País», mostrando dos querellas judiciales que la Fiscalía española presentó ayer mismo en el Juzgado Central de Guardia de la Audiencia Nacional, el tribunal especial cuenta con dos peticiones para que «se proceda con carácter inmediato, de manera cautelar, a la clausura temporal» del bar Zurgai y del bar Ezpala de la capital navarra, aduciendo que se negaron a retirar las fotografías de los presos políticos, tal y como se lo demandaron agentes de la Guardia Civil los días 3 y 4 de agosto, respectivamente. Con carácter previo, la Fiscalía solicita que comparezcan en la Audiencia Nacional española como imputadas dos mujeres a las que identifican como responsables de los dos bares.

El fiscal de guardia en la Audiencia Nacional, Miguel Ángel Carballo, es quien rubrica los dos escritos presentados ayer mismo, insistiendo en que las dos mujeres ya fueron advertidas por la Guardia Civil y que han podido incurrir en un supuesto delito de «desobediencia grave». La adopción de medidas cautelares contra los bares Ezpala y Zurgai es presentada por la Fiscalía española «como único medio de evitar de un modo seguro la continuación de tal conducta criminal con la difusión pública de unos hechos claramente enaltecedores del terrorismo y ofensivos para sus víctimas». La Fiscalía quiere que se impute a las dos mujeres identificadas por la Guardia Civil por los supuestos delitos de «enaltecimiento del terrorismo y menosprecio de sus víctimas» y «desobediencia grave».

La Policía Foral, en Lesaka

Por su parte, desde Lesaka informaron ayer de que la Policía Foral procedió por la mañana a la retirada de las fotografías de los presos políticos de la herriko taberna Arrano.

Según informaron a GARA, dos agentes de paisano se personaron sobre las 11.15 conminando a la retirada de las imágenes de los presos del municipio. Si bien sólo participaron dos policías en la irrupción, al menos una dotación de la Policía Foral con agentes pertrechados de material antidisturbio esperaba en el acceso al pueblo.

Además de retirar las fotografías de los prisioneros políticos, el comunicante añadió que también se llevaron pegatinas, carteles y material de todo tipo, como por ejemplo soportes que denuncian la desaparición del militante donostiarra Jon Anza.

También la izquierda abertzale de Gernika denunció ayer esta persecución al criticar la apuesta represiva de Lakua y en especial la actitud censora que, a su juicio, mantiene el alcalde de Eusko Alkartasuna.

Desde la izquierda abertzale, que gobierna junto con EA en Gernika-Lumo, indicaron que la presión de la Policía autonómica «es una falta de respeto hacia el Ayuntamiento y sus competencias», además de recordar que ya cuentan con un reglamento municipal al respecto sobre carteles y pancartas. Pero incidieron en que el alcalde empleó su prerrogativa como primer edil para «sucumbir a las amenazas» y ordenar la retirada de las fotografías.