A pesar de caer en la tanda de penaltis frente a la Lazio, Osasuna regresaba ayer de su periplo italiano con buenas sensaciones, al menos sabiéndose invicto en el desarrollo de los más de 90 minutos de cada partido. Con un bagaje de dos victorias -1-2 ante el Parma y 1-5 frente al Isola Liri- y el mencionado empate a un gol frente a la Lazio, concluían ocho días de intenso trabajo con la sensación de haber hecho bien las cosas.

Ahora toca descansar hasta el próximo lunes, no sin antes tener una última sesión preparatoria en la mañana de ayer antes de despedir tierras transalpinas. Los jugadores titulares tuvieron una sesión de recuperación, con carrera continua y flexibilidad, mientras que el resto de la plantilla hizo trabajo de potencia aeróbica, técnica colectiva de finalización y partido reducido.

Después del almuerzo, los rojillos tomaron un vuelo con destino a Madrid y de ahí a las 21.30 un nuevo desplazamiento hasta Iruñea, donde preveían llegar bien entrada la noche.

Sin contratiempos

El preparador físico de Osasuna, Joshe Viela, analizaba para la página web de Osasuna la estancia en Italia del club rojillo. «Ha sido muy positiva. No ha habido contratiempos y todo el mundo ha podido desarrollar el trabajo. Los internacionales han llegado sin problemas y han completado el tramo final».

Viela resaltaba que «el equipo se está mostrando competitivo y transmite buenas sensaciones», añadió.

El conjunto rojillo disputará la próxima semana sus tres últimos amistosos de una pretemporada en la que todavía permanece invicto. El martes 18 jugará un triangular con el Real Unión y la Real Sociedad en Irun, dos días después se las verá con el Murcia en La Condomina y el domingo será el de la presentación oficial ante el Deportivo de A Coruña en El Sadar.