El misterio y el flujo de informaciones, en ocasiones contradictorias, siguen envolviendo el caso del «Arctic Sea», el carguero de la armadora finlandesa Solchart Management pero con bandera maltesa que se dio por desaparecido cuando navegaba por el Canal de la Mancha y que fue hallado por un buque ruso cerca de Cabo Verde.

En contra de lo dicho hasta ahora, la Autoridad Marítima de Malta (AMM) aseguró que «los movimientos del navío siempre fueron conocidos durante varios días, a pesar de los informes sobre la desaparición del barco». Reveló que una Comisión de Seguridad Marítima formada por representantes de Suecia, Finlandia y Malta mantuvo bajo control los movimientos del barco, al parecer secuestrado por ocho piratas.

«Hubo consenso entre las autoridades investigadoras de Finlandia, Suecia y Malta para no filtrar ningún tipo de información sensible que pudiera poner en peligro la vida y la seguridad de las personas a bordo y la integridad de la nave», señaló en un comunicado.

La AMM confirmó la detención de ocho personas en relación a este caso y que sus nacionalidades son estonia, letona y rusa. El ministro de Defensa de Rusia, Anatoli Serdiukov, consideró que se trató de «un acto de piratería». En la primera rueda de prensa que ofreció para anunciar su hallazgo, declaró que no había sido secuestrado.

Un portavoz del Ministerio de Defensa indicó que, según la información proporcionada por la tripulación, «los captores pidieron un rescate y amenazaron con volar el barco si no se obedecían sus órdenes». En su interior encontraron equipos para trepar, botes inflables de alta velocidad y bengalas.